El cortafuego es una las estrategias más eficaces para combatir incendios forestales, y una de las opciones más recurrentes para este método es el uso de químicos para la quema de pastizales.

Sin embargo, existe una opción 100% ecológica que también contribuye a la absorción de agua del suelo: el pastoreo dirigido de cabras, técnica de prevención de incendios que impidió la destrucción de un predio familiar, quienes ahora buscan replicar la práctica en zonas de riesgo.

Se trata de la iniciativa "Buena Cabra", impulsada por la pareja cuyo predio de Santa Juana salió ileso de un incendio forestal que en 2023 consumió más de 55% de la comuna de la región de Biobío.

El milagro fue posible gracias a la práctica en la que los animales se alimentan de los pastizales posiblemente combustibles y al mismo contribuyen con sus heces a la configuración del suelo.

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“Mientras las cabras pastorean en un sector determinado, consumen la vegetación que podría transformarse en un combustible para el incendio, creando un cortafuego natural. Además las cabras al pisotear y remover la vegetación también ayudan a disminuir la cantidad de combustible disponible en caso de incendio y van fertilizando el terreno con sus deposiciones para esté más apto para la retención de agua en el suelo”, explica Rocío Cruces sobre la actividad que salvó su terreno en el verano pasado.

Uno de los motivos para el uso de esta inusual técnica de cortafuegos es el daño medioambiental que los químicos normalmente usados para este fin causan en el ecosistema. De esta manera, el rebaño explora el entorno en condiciones respetuosas con el ecosistema, manteniendo el balance entre flora y fauna.

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"Muchos de los cortafuegos que se implementan actualmente se hace a través de químicos, que afecta a todo el ecosistema, tanto la flora y fauna. Esta metodología no. Además, las cabras llegan a zonas poco accesibles”, argumenta Cruces.

Buscan replicarlo

Con la evidencia internacional que muestra resultados favorables en países como Canadá, Australia, España y Estados Unidos, y la local, con la positiva respuesta en el predio familiar de Rocío y Víctor,  "Buena Cabra" se adjudicó el Fondo Común Regenerativo de Fundación Lepe. Con este plan buscan replicar la iniciativa y esparcirla por la comuna de la región del Bíobío.

“Este proyecto fue uno de los seleccionados por la innovación de la propuesta, así como también por buscar generar redes locales entre sociedad civil, el Estado y los privados para la prevención de incendios forestales. El proyecto, además, cuenta con un marcado carácter colaborativo y comunitario, involucrando en todas sus acciones a las juntas de vecinos, escuelas, campesinos de Santa Juana, así como también a la Universidad de Concepción y del Desarrollo”, explica Antonia Madrid, coordinadora del Programa.

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