Un reporte del Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe (OIG) de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) cifra en al menos 4.050 las mujeres víctimas de feminicidio en 26 países y territorios de América Latina y el Caribe en 2022.

En palabras del organismo, entregadas en el marco del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, “no es posible determinar una tendencia con relación a las tasas de femicidio o feminicidio en la región, ya que las variaciones en cada país son pequeñas y no reflejan dinámicas sostenidas de incremento o reducción”.

Pese a esta imposibilidad, el organismo subrayó que “la violencia feminicida se mantiene en la región, a pesar de la mayor conciencia pública al respecto, de los avances legislativos, de la respuesta estatal y de los progresos en medición”.

Chile con “bajas” cifras de femicidio

De los 19 países y territorios de América Latina que informaron el número de muertes violentas de mujeres por razón de género en 2022, las tasas más altas se registraron en Honduras (6,0 por cada 100.000 mujeres), República Dominicana (2,9), El Salvador y Uruguay (ambos 1,6).

En contraste, las más bajas se observaron en Puerto Rico y Perú (0,9), Colombia (0,8), Costa Rica (0,7), Nicaragua (0,5), Chile (0,4) y Cuba (0,3).

“La violencia feminicida se puede prevenir con respuestas estatales integrales y contundentes. Se necesitan con urgencia transformaciones profundas para garantizar que las mujeres y las niñas de nuestra región puedan vivir vidas libres de violencia”, expresó el secretario ejecutivo de la Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs.

Campaña “Lleguemos a cero”

Desde el gobierno, el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género lanzó la campaña “Lleguemos a cero. Todas y todos contamos para disminuir la violencia contra las mujeres”, enfocada en las acciones que puede hacer cualquier persona para contribuir a disminuir la violencia de género: acompañar, intervenir, interpelar o denunciar, cuando sea necesario.

Al respecto, la ministra Antonia Orellana enfatizó que la violencia contra las mujeres es un problema estructural que requiere un cambio a nivel de instituciones, “para acoger, acompañar y reparar”, y también cultural.

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Para la campaña se realizaron 23 conversaciones guiadas en todas las regiones del país, con participación de 181 organizaciones sociales vinculadas al trabajo de prevención y atención de mujeres que han vivido violencia, y con funcionarias y funcionarios del Ministerio de la Mujer y EG, del SernamEG y de PRODEMU.

El fin de la iniciativa es invitar a que “todas y todos podamos involucrarnos y ser agentes preventivos, participantes e interpelar en cualquier hecho de violencia que afecte a las mujeres”, señaló la directora del SernamEG, Priscilla Carrasco.