Experta por republicanos y aborto: "Que se use el drama es de una crueldad indescriptible"

Por: Kathia Cancino Rojas | 05.08.2023

A raíz de la controversia que causaron los dichos del líder de Republicanos, quien aseguró que de tener mayoría en el Congreso buscarían derogar la ley de aborto en tres causales, conversamos con una experta en la materia que calificó la propuesta como un "retroceso significativo".

Revuelo causaron los dichos del presidente del Partido Republicano, Arturo Squella, quien afirmó que cuando sean mayoría en el Congreso presentarán “un proyecto que se haga cargo de esa ley de tres causales (del aborto) que creemos atenta a la vida”.

Los dichos fueron recogidos por el propio Presidente Gabriel Boric, quien aseguró que el gobierno y la ciudadanía no permitirán el avance de la iniciativa. “Quiero decirles que, frente a eso, van a encontrar no sólo partidos políticos e instituciones, sino que un pueblo firme para decir que no”.

Y es que más de 200 organizaciones de mujeres se unieron en defensa al aborto por las tres causales, apelando que la legislación que contempla la interrupción voluntaria del embarazo en situaciones de riesgo para la vida de la mujer, inviabilidad fetal y violación, representa “un avance significativo en materia de salud y justicia reproductiva”.

Al respecto, conversamos con Andrea von Hoveling, ginecóloga especializada en ginecología pediátrica, miembro de la Agrupación Ginecólogas Chile y de la Sociedad de Ginecología Infantil y Adolescente, y exdelegada para Latinoamérica del Consejo de Salud Reproductiva y Sexual, quien consideró de “retroceso muy significativo” los dichos del titular de republicanos.

–¿Qué le parecen los dichos del presidente de Republicanos?

Desde una perspectiva democrática asumir que uno va a ser mayoría en el Congreso por la tendencia actual creo que es mirar en menos a los ciudadanos y ciudadanas. Desde el punto de vista profesional en salud sexual y reproductiva la verdad es que para los estándares internacionales de derechos sexuales y reproductivos la ley de interrupción voluntaria del embarazo que tenemos es tremendamente restrictiva. Entonces ir más atrás de lo que ya estamos sería un retroceso muy significativo e iría en contra de las recomendaciones de organizaciones de la talla de la OMS y de la ONU respecto a la situación actual de salud sexual en nuestro país.

–¿Crees que en ese sentido sería viable que al llegar al poder Republicanos pudieran concitar la unión de las fuerzas políticas para lograr derogar esta ley?

Categóricamente no. Volver para atrás en materia de regulación de derechos sexuales y reproductivos cuando lo único que hemos hecho es ponernos un poco a tono con estándares de países de la OCDE... A nivel de relaciones internacionales incluso es complejo, y por otro lado si es que nos basamos en encuestas de la ciudadanía, claramente hay una mayoría que sí apoya que exista la posibilidad de interrumpir el embarazo al menos en algunas causales, entonces probablemente aunque fueran mayoría en el Congreso no van a concitar un apoyo social mayoritario y probablemente se expondrían como Congreso a una oposición internacional importante.

–¿Cómo ve el escenario en cuanto a los derechos reproductivos y sexuales para las mujeres, considerando los dichos del presidente de republicanos, en la nueva constitución donde son mayoría?

La verdad es que el escenario político y social para los derechos sexuales y reproductivos es bastante poco prometedor no sólo para las mujeres, la verdad es que se nos olvida que los hombres también salen perjudicados por esto y más se nos olvida que personas pertenecientes a diversidades sexo genéricas, a edades fuera de las edades reproductivas, se ven aún más perjudicado por esto. En materia de salud sexual y reproductiva somos un país bastante débil, no tenemos una educación sexual, por ejemplo, que asegure el poder ejercer otros derechos como el anticoncepción, la atención sexual y reproductiva y vernos en un escenario en que están discutiendo aún más restricciones o en se está comprometiendo avances que hasta hace un par de años asumíamos como muy posible es bastante desolador.

Confío bastante en el sentido común creo que pese a las diferencias políticas legítimas que puedan tener distintos partidos políticos y que podamos tener entre ciudadanos en el fondo tenemos mucho espacio de convergencia, poniendo como ejemplo la materia de educación sexual todos nosotros queremos niños y niñas que estén protegidas frente agresiones sexuales, todos queremos adolescentes que tomen decisiones responsables en cuanto a cuándo iniciar su vida sexual con quien iniciarla cómo cuidarse entonces yo confío en que va a primar el sentido común y vamos a en contra esos espacios de convergencia en vez de dedicarnos a pelear desde trincheras políticas que lo único que hacen es exponer a la ciudadanía a más situaciones de abuso y de riesgo.

–¿Cómo podríamos encontrar estos espacios de convergencia para no entramparse en la pelea política?

La palabra clave aquí es conversar, lo que necesariamente implica hablar, pero también escuchar. Creo que si nos dejamos de mirar las diferencias y nos sentamos a preguntarnos genuinamente, qué quieres tú para tus hijos, por ejemplo, que quiero yo para mi hijo lo más probable es que sí tengamos espacios de convergencia y si estamos dispuestos a transar tal vez para algunos de la agenda más progresista van a tener que transar en que algunos temas que afuera y lo que son de una agenda más conservadora van a tener que pensar en que en algunos temas se avance un poco más de lo que ellos quisieran. Probablemente sí, vamos a lograr una agenda que no es valórica, sino que es educativa, y es garante de derechos sexuales y reproductivos.

–A raíz de los dichos Squella, fue el propio Presidente Gabriel Boric quien aseguró que no permitiría que como gobierno avance esa iniciativa. ¿Va en las señales correcta o podría transformarse en un tema político, sobre todo por los roces que produce en la derecha y extrema derecha?

Más allá de mi opinión política, que no viene al caso, en materia de salud sexual y reproductiva la línea ha sido súper clara, que es no dar pie atrás y avanzar en cuanto a los derechos sexuales y reproductivos ya avanzados y avanzar en deudas enormes que tenemos como por ejemplo la educación sexual integral. Me produce una profunda pena que se hable de la interrupción voluntaria en tres causales como si fuera un acto criminal, porque más allá de la opinión personal que cada persona pueda tener respecto a cuando empieza la vida, algo en lo que todos podemos estar de acuerdo es que una mujer que su vida está puesta en riesgo por un embarazo, que sabe que su hijo no tiene posibilidad de vivir o que está embarazada producto de una violación, es una mujer que está viviendo un drama humano y que se use el drama como una bandera de lucha lo encuentro de una crueldad indescriptible.

–Bajo el escenario actual, ¿crees que sería o será posible en algún futuro avanzar en el “aborto libre”?

Si nos comparamos con otros países de la OCDE y si escuchamos a la ciudadanía, lo más probable es que sí avancemos en un aborto sin causales, y yo hago un gran llamado a que las personas que no están de acuerdo y que les conflictúa, tengan muy claro que la forma de evitar abortos es la educación sexual y el acceso a anticoncepción. Los movimientos anti-abortos no evitan abortos; la evitación de embarazos no deseados sí.