Cuando están en escena, uno de ellos encarna al quetzal y otro al cóndor, aves simbólicas y rituales del continente americano. Son Foex & Paulopulus, músicos y productores inquietos entre sus inicios en el hip-hop y sus derivaciones hacia la electrónica y las músicas latinoamericanas, como se oye en el disco que acaban de publicar en abril, “Carnaval a Layqa”.

Foex es Nicolás Carrasco, beatmaker y productor musical chileno iniciado a fines de los años noventa en el grupo de rap FDA, y artífice de los sellos grabadores Potoco Discos y Arrhythmia. Paulopulus es Paulo Pereira, músico y productor nacido en Perú, afincado desde joven en Chile, creador del sello Eroica y uno de los impulsores desde 2018 de los ciclos de electrónica afro y latinoamericana Noche Africana y Tropical Andino Beat.

Juntos a dúo desde 2018, han actuado en Chile, Perú, España, Alemania e Inglaterra; cuentan dos EPs grabados en 2019 y 2021 y dos discos de larga duración: “Welulkawn” (2020) y el propio “Carnaval a Layqa” (2023), donde Layqa corresponde a una palabra tradicional quechua vinculada con la magia, la sabiduría o la hechicería. Pero con un enfoque específico del dúo: “Sabiduría y sanación: ese es el significado que sacamos de esa palabra”, dice Foex.

El carnaval es como un viaje en este disco –continúa el productor–. Nos sentimos súper dentro de Latinoamérica, venimos navegando en este estilo hace bastante rato, el Paulo sobre todo. Y le pusimos “Carnaval a Layqa”, como un viaje hacia la sanación, saliéndonos de las pretensiones musicales, tratando de conectarnos harto con la música. Queríamos que fuese bailable pero un baile que lo sintiéramos profundo.

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Real conexión con la naturaleza

A Niebla, localidad de la Región de los Ríos, fueron Foex & Paulopulus a mostrar “Carnaval a Layqa” por primera vez en directo, en abril de este año.

Fue especial –recuerda Paulopulus– porque tocamos de espalda a la playa, en un lugar de madera, el dueño era un antropólogo e investigador de los pueblos originarios y se unió un historiador que había escrito un libro de la zona. Se formó una conversa con la gente, abierta a escuchar, distinta a la movida de Santiago, que es más de fiesta, hasta tarde. Es otra la energía que sucede en los clubes.

–Para mí fue perfecta en el sentido de que buscamos la descentralización –agrega Foex sobre esa fecha–. Si bien hemos trabajado en la industria musical desde pequeños, estamos buscando que esto funcione donde nos paremos. Y, sobre todo, en lugares especiales, como un valle o una costa que tengan que ver con una real conexión con la naturaleza, con puntos de acá en Sudamérica donde nos sintamos bien. A mí me calzan esas situaciones porque sabemos que a esos lugares asiste gente que está buscando algo distinto más que un lanzamiento normal.

El hip-hop nunca nos abandona

Tres canciones fueron escogidas por Foex & Paulopulus para presentar el disco con respectivos videos grabados en vivo: el de “Cumbia fría” en la iglesia de San Borja en la capital; el de “Ceremonia del ritmo” en un jardín de cactus y cuarzos en Ocoa, provincia de Quillota, y el de “Layqa” en el Cajón del Maipo.

Cada canción representa una de las tres partes del disco –conecta Paulopulus.

Está bien tirado para la cumbia, después para una electrónica más sabrosa y “Layqa” (el último tema) es más folclórico –describe Foex–, con este (compás de) seis octavos que invoca a lo afro.

–¿El disco está pensado para ser tocado tal cual como una experiencia en vivo?

Al principio cuando lo construimos, no –dice Foex–, pero después de hacer el lanzamiento en Niebla decidimos tocarlo así.

–¿Son todas cumbias las del inicio?, ¿o la canción “Jarana” es otra cosa?

No sé si es cumbia, ¿no? –consulta Foex a su compañero.

Tiene su sample de cumbia, pero es una invención –responde Paulopulus–. Es bien autoral.

Por lo general tiene el patrón de cumbia, pero tampoco somos cumbia electrónica –precisa Foex–. Como venimos del hip-hop, agarramos un patrón de cumbia, lo tiramos encima y empezamos a hacer el ritmo.

–Además en la primera (“Ácrono”) hay un sonido que manda todo directo al Medio Oriente

Sí, de hecho nos reímos un poco porque hemos sido explícitos con Latinoamérica, pero de repente pusimos eso, que nos sacó de donde estábamos. Pero nos suena tan bien que queda. En los otros discos hemos invocado la música turca, árabe, hay melodías así.

–Se oyen algunas voces rituales además: ¿son sampleadas?, ¿alguien las grabó?

Nosotros compusimos el disco y después le dimos como una pincelada final de vinilos: sampleamos vinilos para ponerle el sazón –recuerda Foex–. Y como te repito, el hip-hop no nos abandona nunca, ya teníamos estas cumbias, estas bases electrónicas, y cuando empezamos a meterle samples la última crecida para nosotros, fue bacán. Las composiciones estaban listas, pero el sampleo aparte las ensucia, les da un carácter un poco más familiar.

Como ejemplo de la fuente de alguno de esos samples, el dúo muestra un vinilo de cantos afrocubanos.

Sampleamos este disco en el interludio –dice Foex acerca de ese vinilo–… que ya no nos acordamos de cómo se llama el interludio.

–¿Es "Excarcelación"? Importante el nombre que le pusieron además...

Sí, “Excarcelación”. Como que igual vivimos encarcelados, y nosotros tratamos de romper todas las barreras, de generar este baile pero de ser lo más libres posibles. Ya, “estamos en un ritual, te invitamos a nuestro carnaval, bailemos”, pero este track para mí además de baile es oscuro, denso, es una pausa para sentir de distinta manera este carnaval. Es más un trance.

Y la rítmica igual tiene algo mapuche –agrega Paulopulus–. Hemos compartido harto con el Víctor (Cifuentes), que es un amigo y músico mapuche y poeta, nos ha invitado a una ceremonia, y algo de eso hemos interiorizado. Este track tiene ese contraste de ese ritmo, ese pulso mapuche.

Tenemos un animal de poder

Varias colaboraciones figuran entre las pistas de “Carnaval a Layqa”, entre las voces de la joven cantante de jazz Martina Estela, de la Región de Valparaíso (en “Exoesqueleto”), de las cantantes Rvyo (se pronucia Rayo) y Masquemúsica (en “Prende la vela”), Militza (en “Danza con la muerte”) y Solo di Medina (en “El embrujo), además del instrumentista peruano Par Aaq.

La ocasión de ver en vivo este carnaval tendrá lugar este sábado 27 de mayo en la cervecería santiaguina Hasta Pronto, con un show compartido junto a la banda de rock experimental Akinetón Retard, donde Foex & Paulopolus tocarán el disco completo. “Bacán que va a tocar Akinetón Retard”, celebra Foex: “también buscamos que con quienes tocamos sean distintos, que tengan su onda, que sean autónomos, originales, y se creó esta fecha que se ve atractiva".

El dúo se presentaba además, este viernes 26 en la fiesta Tropikal Psikodelia en el barrio Bellavista de la capital, y volverá el mes próximo a Lima para actuar en el festival Perú Independiente entre el 24 y 25 de junio. Ahí mostrarán el espectáculo que trabajan desde hace un año con la pintora y artista visual Juana Pérez, en una puesta en escena que incluye telas de origen maya y pinturas.

–Nosotros venimos del beatmaker –reconoce Foex–, tocando con una MPC (midi production center, instrumento electrónico) o un controlador, pero hemos madurado esa etapa, yo creo. Ella (Juana Pérez) es bien estudiosa de las culturas y pueblos originarios; creamos un imaginario latinoamericano y tenemos un animal de poder: Paulo es el cóndor y yo soy el quetzal, para tomar desde Centroamérica y México hasta Chile el territorio que abarcan esas aves. No tratamos de replicar ningún pueblo en especial, sino llevarlo a lo contemporáneo, que sea nuestra creación.

–¿Cómo fue la asignación?, ¿Hubo que negociar quién iba a ser el quetzal y quién el cóndor?

Yo soy el quetzal, me creo más tropical –sonríe Foex–. En lo personal yo pelo el cable hace tiempo con el quetzal. Me pasa algo con el sabor de Centroamérica, ahora fui a Cuba, vi un grupo de wawancó y me pongo a llorar con esas cosas, con la música centroamericana. El Paulo tiene el rollo más andino, por la conexión de su familia, y por eso creo que eligió el cóndor.

Si poh –confirma Paulo–. Me representa a cabalidad.

 Agenda

Foex & Paulopulus y Akinetón Retard

Sábado 27 de mayo, 21:30 horas, Casa Abierta, Coronel Alvarado 2695, Independencia, Santiago. $12.000, boletos en www.hastapronto.cl/eventos

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