La dolorosa violencia del Chile campesino vuelve con la clásica obra Voces en el Barro
Malva, Hortensia, Lila, Rosa y Margarita. Cinco nombres de flores son los que llevan las mujeres que encarnan la historia de "Voces en el barro", una reconstrucción de la violencia en el Chile campesino, pero también su contracara rebelde.
Para la dramaturga de la obra, Mónica Pérez, este rescate investigativo, luego bibliográfico y ahora escénico de la obra “está ayudando a conocer y estudiar este tipo de historias, ya que estábamos como en una segunda categoría. Decían que no éramos convocantes al público, que no era importante nuestra obra”.
Pieza llevada al teatro por la plataforma Escena Crítica y Memoria y dirigida por Patricia Artés.
Obra que llega a escena desde este 4 al 20 de mayo a una de las principales e históricas salas de la capital: Teatro Nacional Chileno.
La historia relata la vida de estas cinco hermanas sobrevivientes de la violencia patronal, de la pobreza y de una vida de campo en condiciones precarias.
Al mismo tiempo, evidencia sus aprendizajes y experiencias, así como la rebeldía ante un destino que parece, a primera vista, inevitable.
Andrés Pérez
Esta versión de la obra -financiada por el Fondo de las Artes Escénicas, Convocatoria 2022 del Ministerio de las Artes, las Culturas y el Patrimonio- procede a otras versiones de la obra, incluyendo a la ya montada el año 2000 por el recordado creador escénico Andrés Pérez Araya, quien dirigió la pieza como parte de la VI Muestra Nacional de Dramaturgia, de la cual fue parte de las ganadoras.
Voces en el barro es parte de las doce obras escritas por mujeres rescatadas por el trabajo del Núcleo de Investigación y Creación Escénica (NICE), del cual Patricia Artés junto a Maritza Farías y Lorena Saavedra, forman parte.
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Derecho a pernada
-Mónica, ¿por qué visibilizar estas historias?
-Afortunadamente, Patricia Artés vio algo que la sensibilizó en Voces en el Barro e hizo el montaje que veremos el 4 de mayo. Son vidas invisibles de mujeres que les impactó lo que les pasó y que no les importó a nadie, a veces ni siquiera a la propia familia. Las familias solían esconder ese tipo de cosas o lo normalizaban como derecho a pernada que tenía el patrón. En la mentalidad de ellas, en la cultura de ellas, sí era posible, entonces traer eso al presente y mostrarlo estremece. Es importante que se conozca.
-¿Cómo abordas el concepto de rescate?
-La obra da cuenta de una realidad fuerte que ellas vivieron y que ellas comparten con el público, creo que por ahí va el tema del rescate. Una como dramaturga quiere que se sepa lo que ocurrió o está ocurriendo y que no siga oculto, porque además es horrible, no es como una novela que tiene humor, que tiene magia, no, aquí hay algo como escondido, negro como sociedad y esto sale a la luz, sale de una manera que no ofende a la persona que está mirando la obra. Todo lo contrario, invita a revisar esas situaciones, inclusive, la escritura está hecha de una forma que te acerca al problema. Está sin pudor ni nervio porque el problema existió y ellas piensan así porque les pasó y lo vivieron.
-¿Qué entrega la escritura de mujeres en el campo dramatúrgico?
-Se mete en rincones que no siempre la escritura tradicional hace, porque aquí no se habla del campo, del riachuelo, del cielo azul y de las estrellas, no, aquí se habla de gente concreta, de carne y hueso, que muestra problemáticas que están medio escondidas en la sociedad. Hay una diversidad de experiencias, de evidencias, que ellas las traen al presente y las muestran.
-¿Cuál es la riqueza que destaca de esta obra?
-Meterse en los distintos temas que pudieran ser cotidianos pero no lo son, son temas más bien sociales fuertes. Esa diversidad está en esa investigación, en el libro Evidencias. Las Otras Dramaturgias. Hay temáticas que se pueden referir a la educación, el conocimiento y la independencia económica como lugar de emancipación; al amor romántico como espacio de opresión; la violación y la violencia intrafamiliar; a la realidad de la mujer campesina y recoger lo que ellas han vivido, etc. Allí hay varios universos. En esa diversidad está la riqueza de éste libro.
Dignidad a las mujeres
-¿Por qué es importante el relato desde cinco mujeres campesinas?
-En mi obra, lo que ellas vivieron, yo podría haberlo mostrado como aberración, como un crimen, un asesinato, sin embargo, hay todo un contexto que muestra cómo vivieron, que les pasó, cómo fue este proceso en cada una de ellas. Ellas van apareciendo, no estaban todas juntas, se interpelan y llegan a este final porque lo vivido por ellas fue muy fuerte y el espectador puede pensar que no hubo justicia para ellas.
-¿Qué provocó en ellas la investigación para la obra?
-¿Qué dijeron ellas?, dijeron vamos a proceder e hicieron un ritual con el tema de sanación del alma, de exorcizar todo y eso le otorga mucha dignidad a su vida. No cualquiera enfrenta de esta forma lo ocurrido. Ellas hacen un rito para sanarse y poder contar sus vidas porque tampoco hablaban, al principio nadie se comunicaba, entonces es un vómito de todo lo que tenían guardado, por eso ese desahogo para mí era una limpieza del alma.
Dónde y cuándo verla
Voces en el Barro se estrenará este 4 de mayo en la Sala Antonio Varas del Teatro Nacional Chileno (Morandé 25, Metro Universidad de Chile - Metro Moneda).
La temporada se extiende hasta el 20 de mayo, los días jueves, viernes y sábado, a las 19:30 hrs.
Entradas disponibles en Ticketplus.
Además, la obra tendrá otras funciones en Valparaíso, el 27 de mayo en el Parque Cultura, y en La Pintana, el 15 de junio, en su Teatro Municipal.