Este jueves la expresidenta Michelle Bachelet, y quien el 2022 terminó su cargo como alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, ofreció una charla magistral en el contexto de la inauguración del año académico de la Facultad de Sicología de la Universidad Diego Portales (UDP), contexto en el que aludió a la reconstrucción de la vida en común.

"Los tiempos que vivimos no son fáciles, las sociedades son más complejas", dijo aludiendo a las desigualdades que enfrentan las comunidades, hablando además al estallido social de nuestro país, relevando que este fenómeno no se circunscribió a Chile, sino que afectó a muchos de la región y el mundo, justamente por los modelos que tienen a la precarización de la gente más carenciada.

Apuntando a que gente "no estaba satisfecha" y a un "sistema económico que aumentaba la brecha, en  América Latina en países como Ecuador, Chiley Colombia", relevó el desafío que está en el centro del debate del tipo de sociedad que se anhela, a la necesidad de "plantear los modelos de convivencia que necesitamos. Ha habido nuevos desafíos que no imaginamos, dijo apuntando a las capacidades de conducción.

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Fue en este conyexto en el que aludió a la posibilidad que nos ofrece la opción de tener una nueva Constitución. "Miremos cuáles son los modelos que nos pueden garantizar una mejor gobernanza, hoy es una imposición de la realidad pensar en lo local y global. Este es un debate no es de la elite, debe plantearse desde lo social. Con una sociedad empoderada, hay nuevas problemáticas, violencia, legitimidad democrática, igualdad de gpenero, precarización del trabajo, etc.", dijo.

"Hay un contexto internacional muy complejo, la guerra ha generado una inflación (importante), por otro lado, vemos vemos gente que cuestiona la migración. Tenemos sequías brutales, pescadores que se tienen que desplazar, conflictos medioambientales, conflictos que se suman a los armados".

Apuntando a "gente que cree que tiene la solución", Bachelet aseguró que ha visto con sorpresa que hay quienes no dimensionan la envergadura de la crisis. "Es la mayor amenaza al planeta, ¿cuánto estamos haciendo?, creo que poco", dijo aludiendo a las necesidades que urge atender en una sociedad en cambio, con una precarización significativa.

[caption id="attachment_831311" align="alignnone" width="900"] Bachelet este mediodía en la UDP- Foto: @udp_cl[/caption]

Y agregó que "una de las tareas de la sociedad es representar el pacto común, la ciudadanía parece no estar conforme con la oferta política, lo que abre espacio a discursos populistas. Hay una cierta debilidad de la democracia para recoger los anhelos y demandas de la ciudadanía, tenemos por delante una tarea de fortalecer las instituciones de representación, estamos viviendo una transformación muy acelerada", dijo apelando al tipo de convivencia que requiere nuestro país.

"Cuando hablamos de cómo aseguramos una vida en común, es importante cómo (avanzamos) desde el Estado", agregó al tiempo que insistió en que, sin embargo, "todos debemos poner de nuestra parte".

No obstante, enfatizó en el requerimiento de Estados potentes. "Necesitamos que se revisen sus capacidades, tenemos que tener políticas que se adapten a la realidad de los ciudadanos. Un potente estresor puede ser la calidad de los servicios públicos. Si los estados no se preocupan de la salud mental, esta se puede transformar en un obstáculo", recalcó.

50 años del golpe: Tenemos que enfrentar la herencia "de la dictadura”

Fue en este contexto en el que se también se refirió a la conmemoración de las cinco décadas del golpe de Estado. “El debate de este año es particularmente importante, no solo por este nuevo proceso constituyente, sino porque estamos ad portas de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado y tenemos que hacer frente a la herencia que nos quedó de la dictadura de Pinochet”, dijo.

“Uno es la Constitución, a pesar de que ha tenido reformas, y el resto es la pérdida del sentido colectivo, ese individualismo propio del modelo neoliberal que se impuso y que no hemos logrado cambiar sustancialmente, en términos del sentido de cómo las personas viven o no viven el sentido de la solidaridad”, agregó.

"Tenemos que mirar lo que pasó, pensar en cómo garantizamos los derechos humanos y civiles", dijo antes de insistir en la demanda por aunar voluntades de manera colectiva.

Consultada sobre la crisis de legitimidad que atraviesa nuestro país, aseguró que "hay que revisar las instituciones del Estado para que las políticas públicas se implementen (...) hay que buscar una manera más eficiente. El régimen político es un tema que hay que mirar, creo que todos los regímenes tienen cosas buenas y malas, hay que revisar qué nos parece mejor.

"Lo más complejo no tiene que ver con la estructura, puedes tener una estructura perfecta e individuos malignos", dijo alertando respecto de la necesidad de trabajar en esta dirección, recalcando la importancia de que quienes pertenezcan a ella, deber apuntar a los objetivos que esta tiene, que a su vez deben ir en beneficio de las personas.

Para Bachelet, sin embargo, hay que mirar más allá del Estado, porque en nuestro país la crisis de legitimidad trasciende al ámbito de la justicia y su acceso. En este sentido, habló de la transnacionalización de las malas prácticas. "Aquí en Chile también tenemos problemas de acceso a la justicia, la gente tiene menos acceso y se siente muy discriminada, la gente ve debates que le parecen inentendibles, es importante que también la gente elija bien", dijo apelando a la responsabilidad ciudadana.

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