Luego de que Héctor Llaitul, el líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), convocara a "organizar la resistencia armada por la autonomía del territorio y autonomía para la nación mapuche", en respuesta a la decisión del gobierno de desplegar personal militar en la Macrozona Sur, este jueves en medio de un punto de prensa el Presidente Gabriel Boric se refirió al tema.

Consultado en primera instancia si decretar esta medida fue una derrota ideológica, lo desestimó tajantemente. Y así lo argumentó. "Nosotros tenemos el deber de ejercer todas las facultades que la ley nos permite para garantizar la seguridad de los ciudadanos en todo el territorio nacional, para asegurar el abastecimiento y el libre tránsito", sostuvo.

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Y detalló los imponderables que se habían generado en esta zona en los últimos días. "Habíamos tenido problemas. En comunidades del sur, el pan (kilo) a $5.000, centros de salud a los que no se podía acceder, situaciones de temor y violencia inaceptables", dijo antes de hacer una aclaración. "Tengo la más plena convicción de que esto no resuelve el problema", dijo sobre el Estado de Excepción decretado en la Macrozona Sur que entró en vigencia este 18 de mayo.

En este sentido, aludió al plan intersectorial que está impulsando el Ejecutivo, que incluso considera veedores internacionales. "Tenemos que ponerle más empeño al diálogo (para) abordar el tema de fondo, que es la deuda del Estado con el pueblo nación mapuche", detalló.

Respecto de la decisión del Ejecutivo de no querellarse contra Héctor Llaitul, Boric argumentó la determinación apuntando al ámbito ideológico. "Nuestro gobierno persigue delitos. Y los va a perseguir con todo el peso de la ley. Nuestro gobierno no persigue ideas ni declaraciones. Y ahí puede que tengamos diferencias (que) se pueden debatir", dijo categórica y reiteradamente el mandatario.