Este miércoles Roberto Rojas, presidente de la Confederación Nacional de la Pequeña Industria y Artesanado de Chile (Conupia), conversó con Cooperativa, medio en el que convocó al gobierno a "afinar un poco más la puntería" en relación a la compensación transitoria que entregará a las pymes para que se concrete el incremento de sueldo mínimo que el Ejecutivo busca consolidar en $400.000 este año.

Lo anterior, luego de que los grandes empresarios valoraran el acuerdo al que se llegó el lunes con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). Específicamente, los representantes de las pequeñas y medianas empresas reclaman que con ellos no ha habido diálogo en el contexto de las conversaciones a cargo del ministro de Economía, Nicolás Grau, quien no habría reparado la transitoriedad de este gremio.

De hecho, previo a su reunión con las pymes, programada para este miércoles, el secretario de Estado detalló que cuando el salario mínimo llegue a $400.000, en agosto, la propuesta es que el Estado subsidie en $30.000 y la empresa 20.000, con lo que se completaría el incremento de 50.000.

El subsidio, de acuerdo a lo que explicaron desde el Ejecutivo, será variable mes a mes y el monto exacto se establecerá en base en la inflación mensual. En consecuencia, la empresa cubrirá el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el resto lo asumirá el Fisco.

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"Hemos tenido ya algunos acercamientos con el Ministerio de Economía y hay algunos números preliminares. A las 13:00 horas tendremos una reunión donde vamos a tratar de definir el tema. Esperamos alguna holgura por parte del gobierno para discutir el tema, que esto sea producto de un acuerdo y no de una imposición", aseguró el representante de Conupia.

Y agregó que, "naturalmente, creemos que el esfuerzo va a ser muy grande para las pymes, sobre todo en las circunstancias en la que estamos después de la pandemia. Hay una serie de factores que pesan sobre la caja y sobre la liquidez de las pymes, por lo tanto, es una dificultad".

Adicionalmente, planteó que  "el gobierno debería afinar un poco más la puntería y al menos debería cubrir el 50% del IPC, más la diferencia que se origina para llegar al salario acordado con la CUT".

Rojas considera además que "debe haber algún margen de esfuerzo del gobierno para llegar a números que efectivamente no afecten al empleo. En definitiva, si no llegamos a un buen acuerdo, esto va a afectar al empleo, porque la reactivación económica pasa necesariamente por las pymes".