Estudio internacional revela que el reino de los dinosaurios acabó en primavera
El meteorito que hace 66 millones de años acabó con los dinosaurios, golpeó la Tierra en la primavera del hemisferio norte, así lo reveló el estudio de las espinas de peces que murieron apenas una hora después de aquel brutal impacto.
El asteroide Chicxulub, que impactó contra lo que hoy es la península del Yucatán (México), puso fin a la era mesozoica y provocó un evento de extinción masiva, pero también selectivo, pues acabó con los dinosaurios no avianos, pterosaurios, ammonites y la mayoría de los reptiles marinos, mientras mamíferos, aves, cocodrilos y tortugas sobrevivieron.
Aunque se sabía cuándo y dónde se produjo el impacto, hasta ahora se desconocía la estación del año. Los ecosistemas del hemisferio sur, que fueron golpeados durante el otoño, parecen haberse recuperado hasta dos veces más rápido que los del hemisferio norte, aclaran los autores.
El estudio, publicado en Nature, arroja luz sobre las circunstancias que rodearon la diversa extinción de los distintos grupos y las respuestas proceden de los fósiles de las espinas de esturiones y peces paleta encontrados en el sitio paleontológico de Tanis (Estados Unidos).
[Te puede interesar] Descubren embrión de dinosaurio muy bien conservado de a lo menos 66 mil millones de años
De acuerdo con sus resultados, el impacto sacudió la placa continental y provocó enormes olas estacionarias en las masas de agua, las cuales movilizaron grandes volúmenes de sedimentos que engulleron a los peces y los enterraron vivos, mientras las esférulas del impacto (perlas de vidrio de roca terrestre) llovían desde el cielo.
A través de diversas pruebas, los científicos descubrieron que las espinas de los peces registraron un crecimiento estacional muy parecido al de los árboles, añadiendo una nueva capa cada año en el exterior del hueso, explicó Sophie Sánchez, de la Universidad de Uppsala (Suecia).
La distribución, la forma y el tamaño de las células óseas, que se sabe que también fluctúan con las estaciones, aportan una línea de evidencia adicional.
Hallazgo crucial
En este caso, tanto la densidad como los volúmenes de las células estaban en aumento, pero aún no habían alcanzado su punto máximo durante el año de la muerte, lo que implica, según Dennis Voetem, de la Universidad de Uppsala, que “el crecimiento se detuvo de forma abrupta en primavera”.
Puesto que la extinción debió comenzar abruptamente durante la primavera del hemisferio norte, “empezamos a comprender que este acontecimiento tuvo lugar durante etapas vitales y especialmente sensibles de los organismos del Cretácico más tardío, incluido el inicio de los ciclos de reproducción”, agrega.
Y como el otoño del hemisferio sur coincide con la primavera en el norte, la preparación para el invierno puede haber protegido a los organismos del hemisferio sur.
“Este hallazgo crucial -destaca- ayudará a desvelar por qué la mayoría de los dinosaurios murieron, mientras que las aves y los primeros mamíferos consiguieron eludir la extinción”.