Pese a la conciencia ambiental: basura en los ríos de Chile no disminuye desde 2013
Durante noviembre y diciembre del 2021, cientos de voluntarias y voluntarios capacitados realizaron el tercer muestreo nacional de la basura en los ríos de Chile, una iniciativa del Programa de ciencia ciudadana Científicos de la Basura de la Universidad Católica del Norte, que busca generar información científica sobre el problema de la basura en estos cuerpos de agua.
El estudio confirma que la basura en los ríos no se ha reducido, y que las personas aún suelen contaminarlos: el 100% de los sitios muestreados tenía basura, llegando a un promedio nacional de 1,61 items de basura por metro cuadrado, siendo las regiones del Maule y Biobío las que presentaron mayor cantidad de desechos. Además, el 78% de los sitios presentó vertederos dejados de forma intencional, confirmando el descuido general de los ríos.
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La situación preocupa puesto que los niveles se mantienen desde la primera versión del muestreo -en 2013- pese al contexto actual de nuevas políticas públicas e iniciativas privadas para conservar el agua y disminuir la basura. “Los ríos son fuentes de vida y biodiversidad de nuestras cuencas, además de mitigantes del cambio climático, y no los estamos cuidando”, señaló Mauricio Ergas, licenciado en Biología Marina de la Universidad Austral y coordinador del tercer muestreo de ríos.
Martin Thiel, biólogo marino, académico de la UCN y director del programa Científicos de la Basura explicó que “este muestreo se ha realizado en 3 oportunidades, 2013, 2017 y 2021. Al haberse utilizado la misma metodología estandarizada todos los años, hemos podido concluir que la cantidad de basura no ha disminuido”.
Predominio de plásticos de un sólo uso
Los resultados también hacen incapié en que la fuente de la contaminación, en su mayoría, fueron personas o turistas que hacen uso de la ribera, mientras que los tipos de desechos más encontrados fueron plásticos de un sólo uso (32%) seguido de metales (16%), objetos clasificados como “otros” (13%), vidrios (13%), papeles o cartones (13%), y por último, colillas de cigarro (12,5%).
“Hace muchos años está tipificado en el código penal la prohibición de botar basura en el medio natural incluyendo a los ríos. Sin embargo, en la actualidad las leyes no se cumplen ni se fiscalizan. Se requiere de una mejor supervisión y protección general de los ríos y del recurso fundamental que movilizan, el agua”, dijo Thiel.
En este muestreo, la pandemia también mostró sus consecuencias, tal como señala Ergas, “los grupos encontraron mascarillas en el 83% de los sitios. Preocupa que antes de la pandemia estaba en alza el dejar los elementos plásticos de un solo uso como vasos o bombillas, pero eso se ha dejado de lado a medida que las prioridades públicas y las necesidades cotidianas han cambiado. Es necesario retomar el rumbo de la sustentabilidad y dejar atrás la cultura de lo desechable”.
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Protección de los ríos y cambio climático
El estudio recalca que el problema de la basura viene a sumarse a varios otros elementos que amenazan la integridad de los ríos en Chile, por ejemplo, la sobreexplotación de recursos, destrucción y degradación de hábitat y el cambio climático.
En este último punto, además de verse afectados, los ríos vienen a ser una solución en periodos de desastres, por ejemplo, en el escenario de incendios que se vive en ciertas temporadas. “Las sequías y los incendios son cada vez más comunes en Chile debido al avance del Cambio Climático. En ese sentido, los ríos son esenciales, ya que sostienen y conectan la biodiversidad terrestre, su existencia, además, alimentan los suelos y bosques”, recalcó Ergas.
El académico UCN reafirmó por su parte que “los ríos juegan un rol estratégico en poder mitigar de forma eficiente los impactos de las sequías que, por causa del cambio climático, van a aumentar en frecuencia e intensidad en los futuros años”.
Finalmente, el estudio apunta a dos soluciones fundamentales: generar una mayor conciencia ambiental, a través de iniciativas locales, colaborativas, públicas y privadas y con participación de la ciudadanía y a ordenanzas municipales para limpiar las grandes acumulaciones de objetos, pues la basura atrae más basura.