Mascarillas, Covid-19 y trekking: ¿Cómo estamos protegiendo nuestro Medio Ambiente?
Con el retroceso de las medidas de confinamiento en gran parte del país y la llegada del verano, cientos de vecinos y vecinas de las grandes ciudades se han volcado masivamente a utilizar recreativa y deportivamente los espacios públicos, en especial los cerros, parques y otros lugares naturales como ríos, playas y lagos.
Es así que la práctica del senderismo o también conocido como “trekking” ha aumentado significativamente según reportan los organismos especializados, lo que ha generado que muchas personas asistan recurrentemente a los diferentes cerros y parques naturales de Santiago y alrededores con el propósito de pasar un agradable momento al aire libre. Sin embargo, esta emergente práctica deportiva ha traído consigo algunos impactos negativos en lo que refiere al cuidado de estos lugares, en el especial al desecho de las mascarillas desechables, elemento de protección personal fundamental para evitar los contagios por Covid-19 y que es exigido por la autoridad al momento transitar por la vía pública.
[Te puede interesar] La ONU advierte: los plásticos también son un problema climático
La basura asociada al Covid-19 se ha transformado en un importante problema medioambiental para nuestro entorno. En específico, cabe señalar que las mascarillas desechables se encuentran confeccionadas de diminutas fibras de polipropileno un material que no se degrada y que se puede acumular tanto en medios marinos como terrestres, ocasionando graves daños en las especies animales y en los seres humanos. Según la ONG OCEANSASIA, durante 2020 se fabricaron 52 mil millones de mascarillas desechables en el mundo y de ese volumen, los océanos recibieron 1560 millones, lo que se tradujo en una contaminación extra de más de 5 mil millones de toneladas adicionales de plástico. Esta grave situación impacta de igual forma en los distintos entornos naturales pues las mascarillas desechables pesan aproximadamente 4 gramos y, si son desechadas de forma irresponsable, pueden ser fácilmente trasladas por el viento hacia nuestros cerros, lagunas, montañas y ríos afectando a la flora y fauna de aquellos lugares.
Ante este complejo escenario nace la siguiente duda: ¿Cómo estamos protegiendo nuestro medio ambiente al momento de realizar actividades o deportes al aire libre como por ejemplo el trekking? En primer lugar, debemos saber que cualquier acción tendiente al desecho responsable de las mascarillas desechables tendrá un impacto significativo en términos ecológicos y por eso se hace fundamental replicar métodos que nos permitan reducir la contaminación de estos lugares por medio simples técnicas. Para ellos se hace fundamental que las personas, familias y deportistas que utilizamos espacios naturales para el desarrollo recreativo y deportivo llevemos en nuestras mochilas una bolsa donde depositar, de forma separada con otros elementos, las mascarillas utilizadas para posteriormente y una vez que se ha terminado la actividad al aire libre, disponerla en un basurero o recipiente siempre con los elásticos cortados.
En síntesis, hoy más que nunca es de vital importancia hacer un llamado a la ciudadanía a ser responsables con el correcto desecho de las mascarillas, especialmente las desechables, para evitar la contaminación de los parques, ríos, playas, lagos y en especial nuestros cerros. Asimismo, y con la llegada inminente de la cepa ómicron se hace fundamental seguir cuidándonos manteniendo la distancia física, el lavado recurrente de manos con agua y jabón y por supuesto utilizando mascarillas al momento de circular por la vía pública.