Este viernes, la Comisión de Constitución del Senado comenzó a analizar el proyecto que permite el retiro de hasta el 10% de los fondos previsionales.

La iniciativa, que cumple su segundo trámite constitucional en el Senado, debe tratarse en general y en particular, ya que es un proyecto de artículo único, por lo que se espera pueda ser votado y despacharlo el próximo lunes 20 de julio.

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La reforma establece una disposición transitoria que señala que, excepcionalmente y para mitigar los efectos de la pandemia, se autoriza a los afiliados al sistema de AFP que de forma voluntaria y por única vez, retiren hasta el 10% de los fondos acumulados en sus cuentas de capitalización individual.

Por ello, el proyecto establece un monto máximo de retiro equivalente a 150 UF y un mínimo de 35 UF, y en caso de que el 10% de los fondos acumulados sea inferior a 35UF, el afiliado podrá retirar hasta dicha cantidad.

Además, se indica que los dineros retirados no constituirán renta o remuneración para ningún efecto legal y serán pagados en forma íntegra, además de establecerse que no estarán afectos a comisiones o descuentos algunos por parte de las AFP.

La entrega de estos dineros se efectuaría de la siguiente manera: El 50% en un plazo máximo de diez días hábiles de presentada la solicitud, el 50% restante, en el plazo máximo de 30 días hábiles a contar del desembolso anterior.

Durante la discusión de este viernes, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, reiteró la postura del gobierno señalando que el proyecto es "incompatible" con la idea de fortalecer el sistema de pensiones.

Adicionalmente, agregó que se debería hablar del retiro del 44% y no del 10%, pues existe un 27% de los afiliados que van a retirar el 100% de su saldo, mientras que el afiliado promedio va a retirar el 44% de sus fondos.

Briones sostuvo además que el costo económico de esta ley, en valor presente para el fisco, es de 3.520 millones de dólares, por lo que se trataría de una reforma que "irroga gasto fiscal y en un monto sustantivo".

Finalmente, aseguró que el fisco dejará de recibir 760 millones de dólares por concepto de impuestos que no se van a pagar.