Instructivo Mañalich: Individualismo estructural aún en pandemia
Son tiempos de solidaridad y grandeza, nos ha dicho el Presidente Sebastián Piñera, agregando enseguida que, entonces, estos no son tiempos de pequeñeces.
Me quiero quedar con estas palabras, ya que en esta crisis por la pandemia del COVID-19, junto con preocuparse muchos y muchas por su salud, han quedado expuestas las debilidades de nuestro sistema de seguridad social y la necesidad urgente de tomar medidas efectivas que, junto con resguardar la integridad física y síquica de las personas, protejan el empleo y el ingreso de las familias para algo tan básico como es asegurar la subsistencia. Estas tareas requieren entonces de medidas concretas que amplíen la protección social, y no que la pongan en duda o simplemente la nieguen.
El ministro Mañalich ha sido prolífico en sus puntos de prensa, dejando algunas frases que de seguro pasaran a la historia cuando se escriba sobre esta pandemia, como aquella insólita declaración de que capaz que el virus mute y se convierta en buena persona. Pero no le ha dado tanta publicidad a las instrucciones que ha fijado, en particular, a las relativas a la emisión de licencias médicas, siendo que son de una absoluta importancia y gravedad en el contexto en el que estamos.
Mediante el instructivo 891 del 18.03.2020 el ministro instruyó a todas las secretarias regionales ministeriales del país y a los servicios de salud, señalando: “En este contexto y en relación a la emisión de licencias medicas, es dable señalar que corresponderá al medico tratante extender la licencia respectiva por un periodo de al menos 14 días o el que sea necesario de acuerdo al estado de salud, los cuidados requeridos o la evolución clínica del caso que se trate, solo en caso de pacientes confirmados, de acuerdo a la normativa sanitaria vigente".
En el párrafo siguiente agrega el código que las licencias medicas deben llevar según la definición de la OMS, “para casos confirmados de coronavirus”.
Emisión de licencias médicas solo en el caso de pacientes confirmados implica que el gobierno mientras, por un lado apela a la solidaridad y grandeza de chilenos y chilenas para cuidarnos entre todos, promoviendo el asilamiento social y la cuarentena por sospechas de coronavirus, por otro lado, emite normativas que limitan la extensión de licencias médicas preventivas, que le permitan a un trabajador en caso de sospecha de contagio poder guardar cuarentena sin perder sus derechos laborales.
Un verdadero contrasentido, una irresponsabilidad tremenda en un escenario donde todos los expertos y expertas han insistido en el aislamiento de las personas que han tenido contactos con otros enfermos. Lo anterior, sin embargo, no le permite a los trabajadores tomarse licencia que los autoriza a faltar al trabajo. Al contrario, se opta por reemplazar el sueldo mediante un subsidio, lo que termina incentivando su asistencia laboral poniendo en riesgo la salud a toda la comunidad.
Creo que las trabajadoras y trabajadores nos merecemos una explicación de estas medidas que generan condiciones para una mayor propagación de esta pandemia y que provienen precisamente del jefe de la cartera de salud, quien teniendo muchos temas importantes que resolver dentro de esta contingencia, igualmente encontró tiempo para reducir la cobertura de licencias médicas.