Festival IFFR: Un foro de intercambio esencial para descubrir nuevos talentos en el cine
El festival comenzó en forma muy modesta en 1971 como iniciativa personal de Huub Bals, un cinéfilo sin formación académica que luego de dejar la educación secundaria comenzó a organizar toda clase de eventos de jazz y cine. La idea principal del festival (que en un comienzo se llamó Film International) era mostrar cine independiente de todo el mundo, yendo mucho más allá de lo que festivales ya existentes podían mostrar, buscando películas novedosas y experimentales. La segunda idea era que fuera un festival por y para cineastas: realizadores, guionistas, críticos, distribuidores, un punto de encuentro de profesionales del cine que no debía tener carácter competitivo ni otorgar premios.
Más tarde, Bals cambió de parecer, y entendió que el festival podía apoyar económicamente a los cineastas, instaurando el Tigre de Rotterdam, premio en dinero para la primera o segunda cinta de un realizador con estreno en Rotterdam.
Muchos directores, especialmente de Asia, África y Latinoamérica encontraron aquí la primera oportunidad de llegar a un público mundial. Porque junto con los realizadores, muy pronto distribuidores y productores descubrieron que el festival era una mina en la que podían encontrar una veta valiosa.
Los más importantes directores tuvieron un lugar destacado, entre ellos el maestro Ruiz, quien fue cuatro veces "director invitado", y a quien se le dedica una programación especial. Ruiz llegó ser gran amigo de Blas, compartiendo la afición por el cine fuera de la corriente comercial.
Tras la muerte de Bals, en 1987, el festival ha seguido creciendo en número de cintas exhibidas: cerca de 500 entre largo, medio y cortometraje, unos de 2.000 invitados internacionales, de los cuales más de 300 son directores de cine, y un público local que supera las 300.000 entradas.
Los premios
El primer premio que se otorgó en el festival fue el del Círculo de Periodistas de Cine Holandés ( KNF) en 1983, para producción o coproducción holandesa. En 2014 lo recibió Alejandro Fernández por Matar un Hombre, y en 2013 lo obtuvo Alicia Scherson por Il Futuro y de nuevo el año pasado por Tarde Para Morir Joven.
A partir de esta edición se otorga el Premio Robby Müller al cinematografista (director de fotografía) que destaque por su excelencia. Müller fue un cinematografista que trabajó con Wim Wenders, Jim Jarmusch y Lars Von Trier y estuvo como fotógrafo en diversos sets, entre otros de Apocalypsis Now, algunas de sus fotos y polaroids se exhiben durante el festival.
En esta edición, tres cintas chilenas están incluidas en la programación: Ema, de Ricardo Larraín; Blanco en Blanco de Theo Court, que ganó el primer premio en la sección Horizontes del Festival de Venecia en noviembre pasado; y Vendrá la Muerte y tendrá tus Ojos de José Luis Torres Leiva, ya exhibida en los festivales de Londres y San Sebastián. Ninguna de las tres cintas están compitiendo para el Tigre de Rotterdam, el premio principal, que serán entregados este viernes en la tarde. El año del descubrimiento del español Luis López Carrasco se posiciona como una de las favoritas para obtener el galardón.