Ya van más de dos semanas desde que los trabajadores de la Corporación Baldomero Lillo, entidad encargada de administrar el circuito histórico y patrimonial de la comuna de Lota, tomaron la decisión de irse a paro para exigir mejores condiciones laborales.

Sin embargo, la semana pasada algunos miembros del sindicato endurecieron su postura y comenzaron una huelga de hambre, que ya lleva 6 días, a 580 metros de profundidad en la toma del Chiflón del Diablo. Además de esto, el parque Isidora Cousiño y el Museo Histórico de Lota también se encuentran cerrados con lo cual se encuentra bloqueado el acceso a los lugares patrimoniales de la comuna.

Al interior de la mina se encuentran 10 trabajadores, que ocuparon el lugar para generar más presión en contra de la empresa que no ha accedido al reajuste salarial del 20% que están exigiendo.

Hasta ahora no se ha podido llegar a un acuerdo entre las partes debido a que la administración, liderada por Elías Freire Ibáñez, considera que el reajuste es demasiado alto, por lo cual se limitó a ofrecer un 6% (3,4% más el 2,6%  del IPC), lo cual fue rechazado por los trabajadores.

Además de esto, el sindicato exige un bono de término de conflicto y que no existan persecuciones contra los huelguistas.

"Ha venido el seremi del trabajo, diputados, senadores, pero hasta el momento la empresa no ha dado solución", sostuvo a Cooperativa el pasado sábado el presidente del sindicato Lota Sorprendente, Gastón Gómez.

Y es que el seremi del Trabajo, Carlos Jara, trató de acercar a las partes de manera "no oficial". "Estuve conversando con los trabajadores, conociendo sus requerimientos. Luego me reuní con la empresa para ver qué es lo que ofrecían ellos", sostuvo Jara.

Los trabajadores insisten en que la empresa puede subir sus remuneraciones debido al auge que ha tenido el turismo en la zona.

“En los dos últimos años ha aumentado el flujo de turistas. Por día son cerca de mil personas que llegan a recorrer el circuito, por lo tanto sabemos que nos pueden aumentar el sueldo”, sostuvo Ramírez a La Tercera.

Por su parte, la Corporación Baldomero Lillo calificó la huelga de hambre como "lamentable" e instaron a los trabajadores a dejar de protestar.