Andrés Calamaro: "El cariño que le depositamos a un perro es el que le restamos a nuestras propias familias"
A sus 55 años, el músico argentino Andrés Calamaro se ha posicionado como un defensor de la tauromaquia, una práctica que cada día ha sumado más detractores debido a los maltratos a los que son expuestos los animales en función del espectáculo y las tradiciones.
Recientemente, Calamaro reveló que prepara un libro de fotografías taurinas. En entrevista con El Mundo volvió a defender lo que a su juicio es un arte, en un mensaje hacia los animalistas: "Que abran bien los ojos. Mientras mucha gente se muere de hambre, se gastan miles de millones de dólares en alimentar perros y cortarles el pelo. Ésa es una industria que conviene".
El músico agregó que "es perverso, porque además el cariño que le depositamos a un perro es el que le restamos a nuestras propias familias en algunos casos. Hay que pensarlo y mantenerse distante. Lo principal es intelectualizarlo, no creer en el eslogan. Aprender a ver en los más profundo, aprender a sentir. Si no, dedicarse a otra cosa".
"A mí me parece tremendo que en Internet sea un jurado de qué cosa es arte y qué cosa no. Como si hubiéramos escuchado tanta música, pintura y literatura como para decir con suficiencia que la tauromaquia no es arte. ¿Quién lo dice? ¿Picasso? No. ¿Orson Welles? Tampoco. ¿José Bergamín? ¿Manuel Chaves Nogales? ¿Ernest Hemingway? Ninguno de esos lo dice y Salvador Dalí tampoco. Y esos saben de arte".
En otros temas, al ser consultado sobre la relación con su hija, Calamaro contestó que "la veo poco a mi hija. Soy un padre peculiar... Siendo cantante, hago muchas giras, grabo discos y viajo mucho. La hija vive con la madre y yo estoy acá, pero el mes que viene nos vamos a ver. También hay toda una vida por delante para que descubra la clase de padre que tiene. Según vaya madurando, sabrá si le gusta o no".