Apoyo de Sfeir a Bachelet desnuda diferencias internas del Partido Ecologista Verde
La candidatura de la Nueva Mayoría (NM) ha tenido una semana soñada. Al apoyo expresado oficialmente desde la directiva nacional de la CUT, la adhesión de figuras del mundo estudiantil como Moisés Paredes o el mismo Giogrio Jackson anteriormente, en la jornada de ayer sumó a uno de los candidatos presidenciales que participaron de la primera vuelta. Alfredo Sfeir sorprendió a varios llegando hasta el comando al mediodía del jueves, reuniéndose con la misma candidata y expresando que si bien era a título personal, votaría “de manera entusiasta por Michelle”.
En la conversación con la prensa, el ex abanderado del Partido Ecologista Verde aseguró que conversaron junto a la candidata de la NM una serie de temas en los que los que llegaron a un acuerdo con ambos comandos, lo que se traduciría en al menos 40 medidas de corte ambiental durante la segunda administración de Bachelet.
Ellas incluirían la definición de una política nacional ambiental que sea consensuada y esté centrada en los recursos naturales, así como también la creación del Ministerios de Pueblos Originarios, una rama dedicada a la pesca artesanal y otras.
La decisión generó el rechazo desde la misma directiva nacional del Partido Ecologista Verde, que expresó en un comunicado que “lamenta la decisión de su ex candidato a la presidencia, Alfredo Sfeir, de apoyar públicamente a la candidata de la Nueva Mayoría”.
Dicha declaración fue confirmada por el presidente de la colectividad, Alejandro San Martín, quien criticó el prontuario medioambiental de la Concertación y la administración de Bachelet. “Nuestros planteamientos distan mucho de lo que hizo la Concertación. En lo temático, eventualmente puede haber cosas como también puede haberlo con la otra candidata, pero eso no quiere decir que por algunos puntos de acuerdo, uno esté en concordancia con una visión de país completa”, expresó San Martín.
Para el mandamás de los ecologistas, el modelo extractivo que mantuvo la Concertación no sería alterado en un segundo gobierno de la candidata de la NM, y cuestionó que el comando de Sfeir haya sostenido un serie de reuniones pues contradice las decisiones de los Consejos Regionales ampliados que expresaron un amplio rechazo a ambas candidaturas del balotage. “Son opciones completamente personales, como ellos mismos lo han dicho. En lo interno, son opiniones de minorías que lamentablemente actúan en contra de la opinión de la mayoría”, señala.
La molestia interna con Alfredo Sfeir y su comando llegó al nivel que incluso las bases ecologistas del BioBío indicaron que solicitarían la expulsión del ex abanderado. Félix González, presidente de la colectividad regional, expresó a Radio Bío Bío que “vamos a someter al Consejo General esta decisión de pedirle al Tribunal Supremo la expulsión de estas tres personas que en todo momento han estado en conversaciones con la Concertación, sin que nosotros sepamos, y hoy sin ninguna deferencia nos enteramos por los medios de comunicación”.
Cuestionamientos a la cohesión interna del Partido Ecologista Verde
La movida de Sfeir fue comentada largamente en redes sociales, generando debates sobre la real capacidad que tendría a la hora influir en las políticas medioambientales del futuro gobierno, pero también desnudaron una crítica al movimiento ecologista en Chile.
Lucio Cuenca, director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) señaló que el anuncio del ex abanderado ecologista no lo sorprendía. “Para mí, personalmente, no es una sorpresa lo ocurrido hoy día (ayer). Creo que los planteamientos de Sfeir no tienen, ni durante de la campaña ni ahora, una visión transformadora desde el punto de vista estructural”, comentó.
Cuenca analiza que el programa que propuso Sfeir suscribía los planteamientos de la economía verde, reconociendo un rol fundamental al mercado y a la propiedad privada en la gestión de los temas ambientales. ”Esto se aleja bastante de lo que se ha venido construyendo como movimiento socioambiental en los últimos años, y del cual nosotros nos sentimos parte, y que está haciendo planteamientos más de fondo, estructurales. Tiene que ver con el modelo extractivista, con la recuperación y defensa del agua, con una nueva política minera y energética con respeto a los territorios y a las comunidades. O sea, eso no tiene planteamiento en ninguna de las dos candidaturas que están en juego para las próximas elecciones. Es más de lo mismo que ya conocemos”, expresó.
Para Cuenca “no queda claro contra qué Sfeir entrega su apoyo. No hay concretamente compromisos que uno pueda decir que cumplió o no frente a la adhesión que le entrega a Michelle Bachelet”.
Consultado sobre las críticas levantadas hacia el partido y su representatividad social, Cuenca señaló que “efectivamente no surge como producto de un proceso de movimiento socioambiental que madure y pase a la arena de la política. Es más una construcción por arriba, más cercana la lógica actual de la arquitectura política que no responde a procesos ni vinculaciones con el mundo social (…) El discurso de la candidatura de Sfeir no ha logrado ninguna cercanía o conexión con los procesos de defensa territorial o de los procesos socioambientales, o de estar levantando una agenda para la recuperación del agua. Por lo menos yo no identifico esas vinculaciones”.
Finalmente, el director del OLCA fustigó las experiencias latinoamericanas de colectividades como los partidos ecologistas verdes, nacidos en Europa, que han vivido distintos procesos, pero que finalmente terminan ligados a las políticas socialdemócratas, formando una suerte de apéndice de dicha tendencia. ”No hay ninguna de las experiencias de partidos ecologistas verde en Latinoamérica que tenga cierta relevancia. Existen pero no logran como propuesta capturar una adhesión dentro de cada sociedad, no de manera importante. Es un traslado algo mecánico desde el punto de vista de la construcción política”, finaliza.