Luego de las fiestas clandestinas en donde cientos de jóvenes participaron en el acomodado balneario de Cachagua, provocando contagios masivos, el seremi de Salud de Valparaíso, Francisco Álvarez, realizó una grave denuncia.

Esto, porque la autoridad sanitaria reveló que uno de los asistentes y que actualmente está contagiado de COVID-19, está inubicable y tampoco se sabe qué ha hecho durante estos días, dónde ha transitado y mucho menos se sabe si está guardando cuarentena.

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“Está al borde de una tragedia”, se lamentó en Radio Universo, debido a que la trazabilidad de este caso específico está incompleta. “Claramente, esa persona arriesga sanciones, no solo del punto de vista sanitario, sino que también del Código Penal”, añadió

Denuncias y querellas

Además, Álvarez contó que “denunciamos a los organizadores, que nosotros ya los tenemos sumariados. Por otra parte, también denunciamos a dos jóvenes que incumplieron su cuarentena”.

“Fuimos a la residencia de Zapallar y no los encontramos, nos coordinamos con la Región Metropolitana, ellos también fueron a su residencia y de estos dos jóvenes, se encontró uno”, prosiguió.

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Además, reveló que “tuvimos que hacer una denuncia a la Fiscalía, porque muchos jóvenes, dieron una escasa información de los contactos estrechos. En ese sentido, cuando el sábado el ministro Paris anunció que íbamos a efectuar una denuncia en la Fiscalía, automáticamente los mismos jóvenes comenzaron a entregar más información, sin embargo, otros se quedaron callados y eso es totalmente grave”.

Se trata de 20 jóvenes que han guardado silencio. “El delito que le solicitamos investigar a la Fiscalía, tiene que ver con la entrega de información incompleta o información falsa respecto a la investigación epidemiológica", cerró el Seremi.