Michael Schmidt, profesor de microbiología e inmunología de la Universidad Médica de Carolina del Sur, en Estados Unidos, detalló en una entrevista las distintas propiedades de la principal materia de exportación del país: el cobre.

Schmidt explicó que se ha dedicado por más de 10 años a investigar los beneficios que tiene el cobre para la salud, como reducir infecciones, por ejemplo, destacando cómo podría impactar en la lucha contra la presencia del COVID-19 en el mundo.

En una entrevista con El Mercurio, el médico indicó que han sabido "durante los últimos diez años que los materiales hechos de cobre son reconocidos por su gran habilidad para reducir la concentración de microbios en superficies", agregando que las camas hechas de cobre albergan 94% menos bacterias que las camas convencionales, y mantienen bajos los niveles de microbios mientras el paciente está en ellas.

"Al reducir la carga microbiana en el entorno hospitalario, se reduce también la tasa de infecciones", sostuvo el profesor, añadiendo que "ante la crisis del coronavirus, los científicos han descubierto que no solo puede matar a las bacterias, sino también al COVID-19".

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"En 2010 se probó que las mascarillas hechas de cobre podían controlar la propagación de la Influenza, y si derriba a la gripe, también acabaría con el COVID-19, porque ambas son infecciones virales. Entonces los datos sugieren que superficies de cobre, junto con lavado de manos y otras medidas hospitalarias, podrían ayudar enormemente", comentó al diario nacional.

"Sabemos que el cobre puede derribar al COVID-19, pero hay que convencer a la industria de eso. Necesitamos arquitectos y diseñadores que le digan sí al cobre para crear productos en nuestro ambiente", argumentó, explicando sobre lo anterior las posibles instalaciones de superficies de cobre en los centros de salud.

"Se puede poner en las camas de los pacientes y en las superficies que tocan, como los pasamanos y las mesas donde comen, también en los teclados y mouse de los doctores", ejemplificó.

Respecto al necesario esfuerzo entre gobiernos, las industrias y los científicos, Schmidt indicó que él "alentaría a los que toman decisiones a hablar con arquitectos, diseñadores e investigadores para buscar nuevas formas de uso del cobre con el fin de salvar vidas".

"Hemos estado utilizando cobre en los últimos ocho mil años, un producto maravilloso, y ¿lo único que hacemos con él son tuberías?" se cuestionó finalmente el galeno, sobre este importante metal de gran producción en el país.