Cinco locales para disfrutar la comida asiática
Acá mencionamos cinco opciones diversas en calidad, innovación y creatividad y que apuestan por ofrecer algo más que rolls. Pero que comparten una idea matriz: lograr que los comensales disfruten platos frescos, sabrosos y especialmente aptos para la temporada veraniega.
DO SUSHI
Algo oculto detrás de un edificio cerca de la intersección de Suecia con Andrés Bello, Do Sushi es un local de inspiración totalmente japonesa. Hay sobriedad y minimalismo en su estética y una amplia carta de platos de raigambre asiática. Para partir, un Glaciar Moriawase, una mezcla de cortes de pescados de roca, salmón, pulpo y mariscos, sujetos a la disponibilidad existente, es un magnífico muestrario de la diversidad marina chilena. Las ostras mezcladas con mostaza fueron una delicia de frescura. El nigiri de atún, acevichado, con crocante de tenkasu y cebollín blanco es una delicatessen al paladar. Los makis son otro de los puntos altos de Do Sushi. Probamos el maki Jaiba, compuesto por jaiba, palta y camarón, cubierto en palta y togarashi.
Los contrastes entre la palta y los productos marinos se mezclan bien y son uno de los preferidos del público. El rey de la corona es el Usuzukuri Kaigan, un pescado blanco unido a un pulpo confitado con base de ponzu, ají amarillo y chicharrón de alga. Nuevamente, la diferenciación entre el chicharrón y el pulpo rankea alto. Es un plato innovador y sabrosísimo. El tradicional postre nipón Mochi, hecho por arroz glutinoso, dulce y algo empalagoso, cumplió. Hay también un esfuerzo por empaparse de la identidad japonesa en las cervezas, pero en este caso no pasó el filtro -Asahi, demasiado ligera-. Do Sushi es un lugar en que existe distinción y creatividad. Hay sabor y búsqueda por originalidad asiática. Ojo con la música. Una mayor diversidad estilística que esa electrónica de pulso repetitivo sería un mejor complemento a su muy eficiente cocina.
Do Sushi. Suecia 0155. @dosushicl
EL JAPONES
La plaza de Armas de Santiago es uno de los lugares donde en su entorno se encuentra una enorme diversidad de propuestas gastronómicas, desde los tradicionales completos en el portal Fernández Concha a locales de pastas y carnes sin escalas. El Japonés clava las banderas por la comida asiática desde una vocación totalmente pop. En este restaurant conviven en el mismo espacio comedores dedicados a la comida peruana y también a las carnes. Los nigiris de salmón -un corte algo exiguo- concentran más sabor en el arroz, pero son sabrosos. Lo mismo que unos sushis -sin arroz- con destellos de palta, camarón y un envoltorio de pescado blanco -en una generosa porción-. La atención es diligente y ofrece un tiradito de pulpo, que está fresco, bien cocido, con papas picadas finas, hojas verdes y una salsa de ají amarillo. Para compartir, se pidió un maki acevichado, con abundante salsa, pizcas de aceite de oliva y un pescado blanco. Muy apetitoso. Sin tener un rótulo de sobresaliente, El Japonés apuesta por la masividad, pero sin descuidar el buen gusto.
El Japonés. Paseo Bulnes 459. Local 453. @eljapones_chile
OZAKI
Abierta hace un par de meses, las terrazas san Cristóbal es un nuevo polo gastronómico ubicado en los faldeos del cerro del mismo nombre. Con una difusión que aún no alcanza una masividad turística, en el recinto hay nombres consolidados y respetados en el ambiente culinario. Uno de ellos es José Ozaki, un cocinero que en más de dos décadas, ha desplegado sus platos orientales de autor con categoría. Su nuevo local, amplio, espacioso y con la cocina a la vista de los comensales, ratifica su carácter vanguardista. Las Cevi Age Gyozas, con una masa delgada y hecha en el lugar, de camarones y vegetales, son gloriosas. Lo mismo que unos sashimis de salmón y palometa de carne intensa, que se refrigeran por una semana antes de servirse al plato para darle más carácter. El Gunkan Loco, con un aliño picante -para el paladar chileno- es una delicia. Tan sabroso como gustoso. El Sake Batayaki, un salmón flameado con mantequilla, es algo más pesado por la predominancia del lácteo y el Nigiri Cevi, con palometa, mousse de palta acevichada y gotas de trufa también apunta alto. El Cevi Maki, con camarón tempura, palta y manzana encurtida, pez blanco y crema de tigre, también es carta segura. Hay tragos nipones y durante estos días se habilitará una terraza en el tercer piso ideal para ir al atardecer. Ozaki es sinónimo de calidad y de alta cocina.
Ozaki. Constitución 241. @ozakiterrazas
BASK
Tras estar un par de años en un pequeñísimo local en padre Luis de Valdivia en Lastarria, el chef Gonzalo Vidal y su pareja, socios en Bask, acaban de abrir un local en Merced a pocas cuadras acondicionado a su gusto. Con una cocina que es el triple más grande que la anterior, varias mesas más, el doble de personal, pero siempre con una característica: lograr que los comensales tengan una experiencia grata. Todavía sin patente de alcohol -lo resolverán en un par de semanas, aseguran-, el local cuenta con un menú veraniego certero. Unas gyozas de cerdo desmechado sirven como un buen aperitivo. Luego, el tiradito de temporada busca originalidad y frescura. Pesca del día -en este caso, róbalo-, salsa de ají amarillo y mandarina, caviar y crocante de arroz. Nigiri sugerencia, de pesca del día y batoyaki de ajo negro, es un bocado para compartir. Lo mismo que unos rolls con pescado fresco, palta, apio -que le de un toque distintivo- y salsa de nori. Muy bueno. En Bask se percibe el compromiso y las ganas por hacer comida sabrosa. Que la gente vuelva a sus mesas. Es un camino lento, pero convincente.
Bask. Merced 297-A. @basksushi
LA SUTCHERIA
Iniciados como un emprendimiento en Macul que solo entregaba comida por delivery, La Sutchería -un nombre no muy feliz después de tanto local terminado en ía- abrió hace pocas semanas en un pequeño pasaje de avenida Italia casi frente al clásico italiano Da Noi. Allí, junto a otros locales de comida peruana y de pizzas comparten espacio y mesas. Las gyozas de cerdo son irregulares. La masa es demasiado gruesa y deglute todos los demás ingredientes. El asunto mejora con un sashimi de salmón, de cortes bastante generosos bajo una emulsión acevichada con pequeños trozos de almedra y sésamo. El roll de lomo saltado asoma como el gran hit. Con los pequeños trozos de carne grillados -que le dan una presencia más occidental al plato- como novedad, tiene un toque de vinagre y hojas de cilantro. Llamativo y cumplidor. Otro roll con pescado, ají amarillo, cebolla y salsa teriyaki también logra un buen cometido. La Sutchería funciona con promociones y buenos precios. Es una picada, algo más tradicional, pero con el ímpetu de progresar.
La Sutchería. Avenida Italia 1820. @lasutcheria_nikkei