
El corto de Daniel Fuenzalida que retrata realidad de menores adictos a las apuestas digitales
La adicción a los juegos de apuestas digitales en menores de edad y sus consecuencias devastadoras es la temática principal que aborda el cortometraje "El Camino", una problemática poco visibilizada que pone sobre la mesa un debate urgente.
La historia presenta los sucesos de una familia cuyo hijo adolescente padece ludopatía juvenil, por lo que sus padres deben tomar una drástica decisión.
El proyecto, que cuenta con la colaboración de la Fundación Contradicción del animador Daniel "ExHuevo" Fuenzalida, nace de una inquietud compartida por sus creadores ante el creciente bombardeo publicitario de casas de apuestas en medios y plataformas digitales.
Recordemos que el rostro de televisión también enfrentó un pasado lleno de adicciones con las drogas y el alcohol. Sin embargo, destacó el impactó de las adicciones a apuestas en línea recalcando el peligro silencioso en menores.
Fue entonces que, para dar vida al proyecto la producción debió sumergirse en testimonios estremecedores que configuraron la etapa investigativa.
Muchos de esos relatos provenían directamente de niños y adolescentes que describían con claridad síntomas como pérdida de control, ansiedad, deudas y aislamiento.Fundación Apostar No Es Un Juego
En palabras del director creativo, Matías Anríquez, “fue impactante leer casos que perfectamente podrías atribuir a adultos con una adicción, solo que aquí venían de niños hablando de pérdida de control, de deudas, de ansiedad… Fue difícil de procesar”.
Sin embargo, la experiencia fue "profundamente enriquecedora". Y es que muchas personas se emocionaron y agradecieron por el mensaje compartido en el cortometraje, lo cual "ha sido muy reconfortante", aseguró Anríquez.
¿Dónde ver el cortometraje?
“El Camino” se encuentra actualmente disponible de manera gratuita en redes sociales, incluyendo el canal de YouTube de la fundación y las plataformas de Daniel Fuenzalida.
¿Qué síntomas presenta un menor ludópata?
La psicóloga Andrea Gajardo, directora técnica de la Fundación Contradicción, explica que este tipo de adicción no es simplemente una cuestión de fuerza de voluntad.
“En muchos casos, los juegos y apuestas digitales son usados como una forma de regular emociones difíciles o escapar de la realidad".
Por lo tanto, es posible que el menor presente "pérdida de control, problemas de sueño, ansiedad, culpa y aislamiento. Y todo esto puede comenzar muy temprano, incluso en la infancia”, advierte.
Se suma a ello, juego compulsivo, ocultamiento del comportamiento, problemas económicos, ruptura de lazos familiares, creencias erradas sobre el azar, y un progresivo deterioro emocional.