
CCHDH lanza ácida crítica a Matthei y la derecha por dichos sobre "muertes inevitables" en dictadura
La polémica originada a raíz de las declaraciones de la candidata presidencial Evelyn Matthei en relación a los crímenes cometidos durante la dictadura militar han generado un profundo revuelo político y social, impulsando a la Comisión Chilena de Derechos Humanos (CCHDH) a referirse al tema.
"Que nos íbamos derechito a Cuba. Yo lo que quiero señalar es que probablemente al principio, en 1973 y 1974, era bien inevitable que hubiesen muertos, pero ya en el 78, el 82, cuando siguen ocurriendo, ahí ya no, porque había control del territorio”, expresó en dicha oportunidad.
Sumado a la pasividad de la derecha a raíz de la declaraciones, desde la CCHDH lanzaron duras críticas a dicho sector político.
"...demuestra su grave desarraigo al valor de la vida humana y al necesario respeto de la universalidad de la dignidad de la condición del otro", e incluso tacharon de "hipocresía" esta actitud adoptada.
En este contexto, citaron el artículo 1° de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, que afirma: "Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros".
Considerando esto, el principal adversario de la derecha sería "quien desde muchas formas representa a toda la comunidad política, a la sociedad y sobre todo, a la naturaleza humana como ser connaturalmente social".
En ese escenario, la CCHDH le pregunta a la derecha "¿Cómo se sostiene éticamente una postura que hoy condena el crimen organizado con una mano, mientras con la otra justifica el crimen organizado sistemático del Estado durante la dictadura?".
Por lo tanto, validar un sistema de extermino es equivalente a "validar la lógica de que el "otro" no es una persona" y que "no merece existir".
A pocos meses de las elecciones presidenciales, este tipo de discursos trasforman "la vida política nacional en un banal show de la ignorancia".
Por último, "las elecciones políticas no pueden ser una puerta de entrada a los discursos irracionales que fundados en un odio a la vida continúen promoviendo la idolatría a la muerte, a las cosas, al rechazo a las personas", finalizan.