Reforma a sistema político abre el apetito de diputados: Apuntan a reformar sistema electoral y fusionar ministerios
Con la intención de reducir la fragmentación y los “problemas de gobernabilidad” que supone tener a 16 partidos —más independientes— representados en el Congreso, un grupo transversal de senadores presentó una reforma al sistema político que propone dos grandes cambios al régimen imperante: establecer un umbral del 5% de los votos a nivel nacional para ocupar escaños en la Cámara y una norma “antidiscolaje” para que los parlamentarios que renuncien o sean expulsados de sus partidos pierdan el cargo.
La propuesta, sin embargo, levantó reparos generalizados de los partidos que se verían amenazados por el umbral; parlamentarios independientes a quiénes con la reforma se les elevaría los requisitos para acceder al Congreso y por el hecho de que el umbral sólo afectaría a diputados.
Si bien las críticas a la reforma ya se habían planteado cuando se anunció la reforma, estas se intensificaron luego de que la Comisión de Constitución comenzara su tramitación el lunes de esta semana.
En dicha instancia, el ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Álvaro Elizalde, realizó la primera intervención oficial por parte del gobierno sobre la materia. Y aunque el ministro señaló que la propuesta es un insumo relevante para abrir la discusión, también expuso ante los senadores que es “perfectible”.
Por otra parte, el ministro hizo eco de los cuestionamientos en la Cámara apuntando a que “los diputados se han manifestado especialmente atentos y disconformes, porque señalan que es una norma que sólo los afecta a ellos y no al conjunto del Congreso Nacional”.
Uno de los diputados que ha sido especialmente crítico con la reforma es Jaime Mulet. De hecho, el expresidente de la Federación Regionalista Verde (FRVS) presentó un proyecto paralelo de reforma al sistema político que comenzó a revisarse este lunes en la comisión de Gobierno de la Cámara luego de transmitir su molestia al comité político del gobierno el pasado 2 de diciembre en una reunión en La Moneda.
“No tenemos problemas con los umbrales, con los mínimos. Pero sí tenemos un problema profundo con la forma en cómo se aborda el proyecto de cambio al sistema político que se está discutiendo en el Senado (...) En la Comisión de Gobierno Interior fue posible poner en discusión un proyecto de ley que presentamos hace más de un año y que busca lo mismo: evitar la fragmentación, incentivar la desfragmentación, pero a través de un modelo democrático que no le meta la mano la urna”, emplazó Mulet.
Fórmula de federaciones gana adhesión
De todas formas, en el Partido Socialista —tienda que ha liderado las tratativas— dicen que su postura es de “absoluta flexibilidad” respecto a las normas. Incluso, la senadora y presidenta del PS, Paulina Vodanovic, valoró la propuesta de Mulet.
“Aquellos partidos que son más de nicho, mi intención al menos no es que desaparezcan, porque eso sería tapar el sol con un dedo (...) Lo que podemos buscar para una mejor organización política es, por ejemplo, trabajar como federaciones, que es una propuesta muy interesante que ha hecho el diputado Jaime Mulet y que a nosotros nos gusta y que podríamos avanzar en eso”, dijo en entrevista con El Desconcierto la senadora haciéndose cargo de las críticas que ha recibido el proyecto.
Desde la DC también han transmitido su molestia ya que, a la luz de los últimos resultados electorales, el proyecto podría marginarlos del Congreso.
Consultado por El Desconcierto, el diputado y presidente de la DC, Alberto Undurraga, —también patrocinante del proyecto de federaciones— afirma que si bien la reforma es “necesaria” esta tiene que ser “complementada con otros elementos”.
“El proyecto de federación que presentamos junto al diputado Mulet hace algunos meses apunta a ello, perfeccionar la reforma que se está viendo en el Senado. Pero lo central, es que Chile necesita que haya menos partido y nos parece que la forma más eficiente de hacerlo es eliminando los pactos, pero si el camino son los umbrales —que fue el acuerdo unánime en la comisión experta— la verdad es que estamos abiertos a que ese sea el mecanismo”, señala el diputado.
Reforma abre apetito de diputados
Si bien desde el Senado y los partidos que impulsan la reforma se han encargado de enfatizar que esto no es una afrenta contra los partidos pequeños e independientes, de todas formas la propuesta ha sacado ronchas. Por lo mismo, desde la Cámara se espera una dura respuesta.
Varios diputados transparentan fuera de micrófono que lo ideal es que la reforma no sea aprobada antes de la elección parlamentaria y presidencial de 2025 que podría verse “distorsionada” por un nuevo sistema “impuesto sobre la hora”.
Además, el gobierno y los partidos patrocinantes, deberán lidiar con el hecho de que hay otras materias en el aire que podrían incluirse en la reforma lo que amenaza con dilatar la discusión al punto de que posiblemente no vea la luz en este gobierno. Sumada a la ley electoral que debe regular el voto obligatorio en las próximas elecciones, está el reciente proyecto presentado por el diputado Vlado Mirosevic (PL) que propone fundir las carteras de Interior, Segpres y Segegob.
Sobre esto, el diputado y presidente de la Comisión de Gobierno Rubén Oyarzo (Independiente) señala a El Desconcierto que “si queremos un cambio en la reforma política hay que discutirlo en serio y no que se junten dos grandes conglomerados de izquierda y de derecha y lleguen a un acuerdo para que antidemocráticamente hagan desaparecer a los independientes y los partidos que tienen poca representación por los votos que han sacado”.
En esa línea, Oyarzo asegura que en la comisión que preside esperan poder incluir la regulación del voto obligatorio en la reforma, el voto extranjero, incluso dar el debate sobre la fusión de ministerios.
“Es importante que la reforma abarque estos dos temas (sistema electoral y político) porque no puede ser que estemos en septiembre o octubre de 2025 tramitando una ley corta para regular el voto obligatorio. Nosotros vamos a citar al ministro Elizalde de la comisión para ver cómo están estas dos reformas”, sostiene el diputado.
Opinión similar expresa Undurraga quien señala que la reforma al sistema político y electoral deben tramitarse en conjunto.
“El argumento de llevar por carriles diferentes estos temas es una trampa, porque significa aprobar uno y dejar el otro sin aprobar. Si nosotros creemos que el sistema político necesita el voto obligatorio, como lo creo, tiene que ir incorporado en este proyecto: legislar sobre el voto obligatorio para los ciudadanos chilenos y respecto al voto voluntario para los extranjeros avecindados en Chile”, señala el Presidente de la DC.