“¿A quién diablos le importa?”: Los dichos del reelecto Trump sobre la crisis climática
“Hablan del calentamiento global pero hoy hace frío” o “dicen todo el tiempo que el océano subirá en 500 años un octavo de milla. ¿A quién diablos le importa?”. Estas son algunas de las frases del ahora reelecto Donald Trump durante rallys y debates para su campaña, negando la evidencia científica que se ha conocido en los últimos años sobre la crisis climática, o entregando datos falsos minimizando el aumento del nivel del mar.
Las frases negacionistas del cambio climático fueron una constante en los eventos de campaña de Trump. A fines de septiembre, mientras el huracán Helene dejaba cientos de fallecidos en el sudeste de Estados Unidos, el entonces candidato declaraba ante su público que se ha dejado de hablar del medio ambiente “porque la gente ya no les cree” y que la acción climática “es la mayor estafa de todos los tiempos”.
Pero además de cuestionar el cambio climático, Trump ha prometido durante su campaña aumentar la extracción de gas y petróleo y cortar el financiamiento a proyectos de energía renovable, además de retirarse del Acuerdo de París por segunda vez, dejando de aportar a fondos para que los países en desarrollo enfrenten la crisis climática.
Un análisis del sitio inglés de investigación científica Carbon Brief, calcula que el plan de gobierno de Donald Trump significaría 4 billones de toneladas más de CO2 en la atmósfera a 2030, en comparación con lo que se proyectaba con los planes de Joe Biden y Kamala Harris. Las emisiones extra equivalen a lo que contaminan Japón y la Unión Europea en un año.
El resultado de las elecciones despierta preocupación en la comunidad científica y ambientalista, debido a la influencia de Estados Unidos como el segundo país más contaminante del mundo después de China.
Ambientalistas reaccionan a Trump
La embajada de Estados Unidos en Londres amaneció pintada de naranja como un acción de protesta de los miembros del grupo ecologista Just Stop Oil ante el retorno de Trump a la Casa Blanca. “En España cientos de cuerpos siguen siendo sacados del barro. Esto es solo un pequeño presagio de lo que está por venir si no cambiamos de rumbo de inmediato”, señala un comunicado de la organización.
Otros especialistas climáticos del mundo también reaccionaron con preocupación pero también con optimismo. “El resultado de estas elecciones se considerará un duro golpe para la acción climática mundial, pero no puede detener ni detendrá los cambios en curso para descarbonizar la economía y cumplir los objetivos del Acuerdo de París”, comentó Christiana Figueres, responsable de clima de la ONU entre 2010 y 2016.
“No hay lugar para el negacionismo climático en el contexto de la emergencia climática. La sociedad estadounidense es corresponsable del calentamiento global y, a pesar de la victoria de Trump, será sin duda corresponsable de las soluciones a la crisis climática”, comentó por su parte la ex ministra de Medio Ambiente de Brasil, Izabella Teixeira.