La situación migratoria de miles de venezolanos en el extranjero preocupa a las autoridades nacionales e internacionales luego que Nicolás Maduro ordenara el cierre de sus consulados en siete países de Latinoamérica tras ser cuestionada su reelección como mandatario.

De acuerdo con lo comentado por los gobiernos de la región, desde la salida de las misiones diplomáticas de Venezuela y el cierre de las embajadas en el extranjero, la posibilidad de que los migrantes regularicen su situación consular o tramiten documentos de identidad se volvería imposible.

Esta situación complejiza aún más el movimiento de personas desde el país caribeño, desde donde han migrado al menos siete millones a lo largo de la última década. En Chile, en tanto, se estima que podría haber entre 500 mil y 700 mil venezolanos, muchos de ellos sin documentos de identificación.

De hecho, ante un eventual aumento del flujo migratorio, la ministra del Interior, Carolina Tohá, aseguró que "hay una preocupación de que esto se pudiera intensificar y para eso ciertamente tenemos que prepararnos. Ya se han estado teniendo en todos estos días bastantes contactos y primeras conversaciones".

En dichas reuniones, entre otros alcances, se reconfirmó que no se crearán nuevas políticas de refugio aunque sí se mantendrán las que ya existen respecto de asilo y ayuda humanitaria, y no se podrán realizar trámites para apostillar ni sacar visas o carnés de identidad.

En esa línea, el diputado del Frente Amplio, Diego Ibañez, especificó que "las personas que hoy están solicitando algún tipo de cobijo en Chile porque en otros países hay crisis sociales, políticas y de Derechos Humanos, lo cierto es que el Presidente Boric estará abierto a esa reflexión y a acoger a quienes lo requieran".

"Distinto es ir a la frontera y decirles que vengan en masa, eso el Presidente naturalmente no lo hará, es un error que incluso por la propia derecha ha sido reconocido (...) En eso el Presidente no se va a perder y hará todos los esfuerzos necesarios para mantener las fronteras ordenadas”, afirmó.

Por su parte, el director del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Thayer -que estos dos últimos días ha tenido reuniones de coordinación con el subsecretario Manuel Monsalve y la ministra Tohá-, explicó que autorizarán la salida de personas venezolanas incluso con pasaportes vencidos, pero no podrán volver a ingresar.

"Es importante señalar que las personas venezolanas que residen en nuestro país, independiente de la situación migratoria en la que estén, pueden salir con sus pasaportes vencidos (...) Chile tiene una política migratoria que establece que no se generarán incentivos ni llamados para que nuevos flujos migratorios se activen hacia nuestro país", agregó.

De acuerdo al encargado nacional de migraciones, lo anterior está explicitado "en la política migratoria que se ha promulgado en diciembre del 2023 y eso no va a cambiar, no se van a generar nuevos incentivos para flujos migratorios ni se van a crear nuevas visas especiales para que vengan personas".

Con todo, Thayer defendió el trabajo del Gobierno en materia de fortalecimiento de las fronteras, especialmente en el norte, destacando la presencia de Fuerzas Armadas y policías además de integrar mayor tecnología. "Son medidas que están dando resultados", manifestó.

Respecto de las 24 mil órdenes de expulsión administrativas vigentes para extranjeros que han cometido delitos en nuestro país, Thayer comentó que se complejiza la situación. "Evidentemente que sin relaciones, o con las relaciones así como están, si bien se dificultan estamos haciendo lo posible para que estas dificultades puedan ser subsanadas con otros países", complementó.