Vecinos de Huasco impugnan al SEA por visto bueno a relave: No respondieron sus observaciones
Huasco es la única ciudad conocida como “zona de sacrificio ambiental”, donde aún no se ha cerrado ninguna termoeléctrica. Según estudios sobre contaminación y salud, vecinos y vecinas de la zona tienen 71% más riesgo de morir por enfermedades cardiovasculares que el promedio del país.
Con estos antecedentes, habitantes de la zona vieron con preocupación cómo en 2023 se aprobó la instalación de un tranque de relaves mineros en la ciudad, sumándose a las cinco termoeléctricas a carbón y la planta de pellets de fierro ya existentes.
Ahora, iniciaron un proceso judicial ante el Primer Tribunal Ambiental para impugnar el permiso ambiental otorgado al proyecto. Desde la comunidad afirman que durante el proceso de evaluación ambiental del proyecto no se consideraron los efectos de la contaminación acumulada que ya sufre la zona por la actividad industrial.
Según el recurso presentado, no se respondieron las observaciones ciudadanas que reclamaban sobre la falta de información de base en cuanto al impacto sinérgico que ya tiene la actividad industrial acumulada en la salud de la gente.
Además, reclaman que el proyecto no establece un plan de emergencia ante sismos de intensidad por sobre la media ni un paquete de medidas para aplicar tras el cierre del depósito. También sostienen que no se consideraron debidamente las observaciones ciudadanas referidas al impacto que puede tener la actividad del proyecto en las 737 especies nativas vegetales del lugar, ni en los monumentos arqueológicos.
Relaves al mar
El proyecto, con una inversión de US$ 10 millones, consiste en la construcción, operación y cierre de un depósito de relaves filtrados proveniente de la planta de pellets de fierro de la minera CAP en el mismo sector. El depósito admite 14,6 millones de toneladas de relave minero.
El objetivo del depósito es transformar la manera en que se disponen los desechos mineros, ya que hasta ahora eran vertidos al mar a través de un emisario submarino. Los relaves que se depositarán en la nueva planta serán filtrados y secos, lo que disminuye el riesgo de infiltración a las napas subterráneas de agua.
El proyecto es parte de un plan de cumplimiento luego de que los titulares de la empresa fueran sancionados por la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) por la descarga de residuos mineros al mar.
Ya existía ante el Tribunal Ambiental otra causa contra el depósito de relaves, donde se argumentaba que durante la evaluación se modificó sustancialmente el proyecto sin que hubiese un nuevo proceso de participación ciudadana para evaluar los cambios.
Además, se reclamó que durante el proceso de consulta indígena realizado para evaluar el proyecto no se tomaron en cuenta todas las comunidades indígenas del sector, quedando algunas sin posibilidad de participar. Ambas causas serán tramitadas como una sola por el tribunal.
Foto: Agencia UNO.