"La oposición sigue subiendo sus niveles de desaprobación, llegando al 68% (+2), mientras que sólo un 7% (-2) aprueba su desempeño", se lee en el reporte enviado a la prensa desde la consultora a cargo de Data Influye, la encuesta que este martes en la noche oficializó el resultado de su último sondeo de opinión pública.

Y es que tal como lo evidencia la encuesta, desde el 2023 a mayo del año en curso, el desempeño de este sector ha experimentado una merma de 9%, como lo evidencia el registro histórico de este trabajo de levantamiento de información.

Como se constata en el archivo adjunto, ya en octubre último la oposición había incrementado considerablemente su rechazo, una tendencia que no ha logrado revertir con el paso de los meses y que, de hecho, se ha consolidado con cifras al alza durante este 2024.

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Fracaso constitucional desperdiciado

Cómo se puede explicar esta creciente desaprobación es lo que comenta Rodrigo Espinoza, director de la Escuela de Administración Pública de la Universidad Diego Portales (UDP), para quien el resultado del sondeo no representa novedad alguna.

Básicamente, plantea, "el incremento en el rechazo a la oposición se puede entender desde dos perspectivas. La primera de ellas tiene que ver con la oportunidad desaprovechada que tuvo la derecha de conducir el proceso constitucional después del primer fracaso constituyente, donde tuvieron una enorme mayoría para poder realizar una propuesta de consenso y que fuese aceptable y aprobar de la ciudadanía en el plebiscito de salida".

"Sin embargo, lo que ocurrió es que finalmente la derecha, sobre todo el Partido Republicano, más Chile Vamos, impusieron su mayoría y la propuesta nueva Constitución terminó siendo una suerte de programa de gobierno, principalmente de la derecha más radical y, evidentemente, ese rechazo tuvo un costo político", complementa.

Para Espinoza, "ahí vamos viendo reflejado todo lo que tiene que ver con el declive gradual de la oposición, sobre todo la pérdida de confianza en la misma, ya que era una oportunidad para que pudiéramos mostrarse como un conglomerado, un sector político capaz de ordenar, capaz de dirigir y, sobre todo, de llevar adelante una propuesta de nueva Constitución que fuese más de consenso en comparación a la del primer proceso".

Casos de corrupción castigan a la derecha

"Otra dimensión, también importante, tiene que ver con dos con dos elementos que subyacen a esta lógica que tiene que ver, en primer lugar, con los casos de corrupción también que saben que se ha visto envuelta la derecha", agrega.

En este sentido, apunta principalmente "a lo que ha ocurrido en las municipalidades, específicamente en la Municipalidad de Las Condes, y también por supuesto en la Municipalidad de Vitacura, y que han sido casos al menos dentro de lo que es el área metropolitana y que han sido escándalos que han logrado connotación nacional y que, eventualmente, eso genera una pérdida de confianza de la ciudadanía hacia la oposición como alternativa del gobierno".

Lo anterior, argumenta, "dado que tienen este tipo de prácticas corruptas alojadas en algunos municipios, de hecho también podríamos sumar el caso de Algarrobo, estamos hablando aquí de un ya exalcalde, que entró como independiente, pero independiente cercano a la derecha".

"Entonces evidentemente, hay un declive que se suma también como factor, los casos de corrupción que han logrado alta notoriedad en la escala a escala nacional", asegura Espinoza al tiempo que recalca que, "por otra parte, tenemos lo que está vinculado a la postura obstruccionista de la oposición".

Obstruccionismo de la agenda del Ejecutivo

"O sea, el actual gobierno, si bien no goza de popularidad, sí uno ve las otras encuestas que andan rondando (...) finalmente hay una demanda por avanzar en todo lo que tiene que ver con una agenda redistributiva, principalmente para mejorar las pensiones", ilustra.

No obstante, plantea, "lo que hemos visto finalmente, y lo que se ha visto principalmente en los medios de comunicación masivos, es una actitud un tanto obstruccionista por parte de la derecha de no querer avanzar principalmente en el proyecto de la reforma de pensiones, donde la derecha no iba a negociar, a menos que el 6% que estaba en discusión, no fuese ciento por ciento para solidaridad, sino que más bien se repartiese tres y tres.

"Tres para cuentas individuales y 3% para solidaridad", detalla. "Sin embargo, el gobierno pese a bajar su umbral, y adherirse a la propuesta de la oposición, sigue existiendo obstruccionismo a la propuesta, que puede ser por razones técnicas, pero eventualmente a ojo la ciudadanía se ve cierto obstruccionismo y cierta mezquindad", agrega.

Sobre todo, asegura, en su ejercicio "de bloquear la agenda del oficialismo en este tipo de reforma, más todavía pensando que tienen una carta presidencial fuerte, como es el caso de Evelyn Matthei, quien sí ha ido ganando espacio, pero eso no se ha traducido en mayor confianza o mayor apoyo al rol de los partidos de la oposición".

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