Como ya se sabe desde hace mucho tiempo, en Chile, la principal causa de muerte entre las mujeres en edad reproductiva es el cáncer de mamas. A raíz de esto, es que los expertos hacen constantes llamados para realizarse los chequeos médicos preventivos necesarios.

La mamografía, el Papanicolau y el test del Virus del Papiloma Humano permiten detectar a tiempo el cáncer cervicouterino y de mama, dos de las enfermedades más frecuentes entre las mujeres chilenas.

Bajándolo a cifras, en el año 2022 el cáncer de cuello uterino y de mama ocuparon el primer y quinto lugar entre los más frecuentes en Chile, con 5.640 y 1.559 nuevos casos, respectivamente, de acuerdo con cifras del Observatorio Global del Cáncer (Globocan).

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Es por eso que desde la Fundación Arturo López Pérez (FALP) buscan que las mujeres en la edad adulta se hagan los chequeos médicos anuales y adopten hábitos de vida saludables, pues son fundamentales para cuidarse y detectar eventuales problemas a tiempo.

¿Cuáles son los chequeos que deben realizarse las mujeres?

De acuerdo a FALP, son:

• Mamografía

Es un examen indicado para detectar el cáncer de mama, enfermedad que se produce por el crecimiento descontrolado de células en la glándula mamaria.

¿En qué consiste? Una mamografía es la imagen de ambas mamas tomada con el mamógrafo, una máquina de rayos X que analiza las glándulas mamarias frontal y lateralmente, con el fin de identificar posibles signos de cáncer en sus etapas iniciales, incluso antes de que sean palpables o de que las pacientes noten algún cambio físico.

¿Quiénes deben realizarse este examen? Todas las mujeres a partir de los 40 años de edad. Si existen antecedentes familiares directos de cáncer de mama o el ginecólogo o médico tratante lo considera necesario, puede comenzar antes.

• Papanicolaou o PAP 

El Papanicolaou es un examen que detecta precozmente el cáncer cervicouterino, el que se produce en las células del cuello del útero, es decir, la parte que se conecta a la vagina.

¿En qué consiste? Es un procedimiento ginecológico que investiga cambios en las células del cuello uterino, que podrían convertirse en cáncer si no se tratan a tiempo.  Para esto, el/la profesional de la salud inserta un espéculo en la vagina, que le permite visualizar el cuello del útero y extraer una muestra de las células que serán analizadas en el laboratorio. El análisis alerta sobre cualquier variación anormal o afecciones precancerosas en dichas células, las que son monitoreadas y tratadas para prevenir el desarrollo de la enfermedad.

¿Quiénes deben realizarse este examen? Cualquier mujer puede desarrollar la enfermedad, por lo que en la visita de control ginecológico anual se incluye la toma del Papanicolaou a partir de los 21 años, o según lo que estime el médico tratante.

• Test de autotoma de VPH 

Es un examen que permite pesquisar el Virus del Papiloma Humano (VPH), un microorganismo que se transmite a través de relaciones sexuales orales, vaginales y anales con otra persona infectada, y que es el causante de casi todos los casos de cáncer cervicouterino.

¿En qué consiste? El test de autotoma de VPH es un innovador mecanismo de diagnóstico temprano, que se ha incorporado a la atención de salud en las últimas décadas y que es capaz de detectar la presencia del virus en el cuello uterino e identificar su genotipo incluso antes de que se produzcan alteraciones a nivel celular.  Su realización es similar al PAP: La muestra vaginal es tomada por la propia mujer y luego entregada al centro médico respectivo para su análisis. De acuerdo con diversos estudios internacionales, este test ha demostrado tener una alta sensibilidad y especificidad.

¿Quiénes deben realizarse este examen? Se recomienda efectuarlo a partir de los 30 años.

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“Detectar a tiempo el cáncer de mama y el cáncer cervicouterino es clave para aumentar las probabilidades de sobrevida de las pacientes chilenas. La única manera de hacerlo es con los exámenes preventivos. La toma de mamografía, el PAP y el programa piloto de test del Virus de Papiloma Humano que implementamos para mujeres mayores de 40 y 30 años, respectivamente, son las herramientas más eficaces para detectar lesiones cancerígenas antes de que sean palpables, y así dar inicio inmediato a tratamientos que pueden salvar vidas”, declaró Soledad Neumann, Gerente de Donaciones y Beneficencia de Fundación Arturo López Pérez.