Tensión PS-PC y presiones por primarias enredan el acuerdo oficialista para municipales
Un movido “súper lunes” tuvieron los líderes de los partidos oficialistas. Además del comité ampliado que encabezó el Presidente Gabriel Boric con sus ministros y las cabezas de los partidos de la alianza de gobierno, durante la jornada las directivas oficialistas se dieron cita para avanzar en el acuerdo electoral de cara a las elecciones municipales y de gobernadores.
En la previa de la cita, las diferencias entre el PS y el PC por el cupo de Santiago que ostenta la alcaldesa comunista Irací Hassler y la arremetida del mismo PS por el sillón de Emilia Ríos (RD), jefa comunal de Ñuñoa, habían tensionado el ambiente en la coalición oficialista que irá junto a la DC en estos comicios.
Los mismos que deben celebrarse el 27 de octubre bajo el llamado, con voto obligatorio, de Elección General de Gobernadores Regionales, Consejeros Regionales, Alcaldes y Concejales.
Tensiones a las que se suma la autocrítica planteada por el diputado Gonzalo Winter al gobierno, y las consiguientes reacciones, que han enfriado la relación entre los partidos que deberán enfrentar el siguiente evento eleccionario bajo el alero de una gran coalición que abarque desde el PC a la DC.
Tensión por Santiago y Ñuñoa
Cuando el PS presentó a sus precandidatos para las municipales, el nombre de Ismael Calderón llamó inmediatamente la atención.
Pese al acuerdo de que los alcaldes oficialistas iban a recibir el respaldo de la coalición para la reelección, el PS decidió de todas formas presentar un candidato y llamar a primarias.
Como lo adelantó El Desconcierto, la estrategia del PS generó molestia en el resto de la alianza, en especial en el Partido Comunista y el Frente Amplio.
Sobre la polémica, el presidente comunista, Lautaro Carmona, ha comentado que la candidatura es mejor aspectada es la de Hassler y sostuvo que la presidenta del PS, Paulina Vodanovic, le expresó que la intención no es “presionar” al PC por Santiago.
Sin embargo, se ha hecho patente la intención del PS por disputar el cupo de Ríos en Ñuñoa, esto luego de la polémica que protagonizó la alcaldesa por la desvinculación de 200 profesores de establecimientos educacionales controlados por el municipio.
“Estamos convencidos de que la alianza progresista va a respaldar a Emilia Ríos por la buena gestión que ha tenido en la comuna, logrando una inversión histórica en seguridad, teniendo el cuartel más moderno en la Región Metropolitana, aumentando en más de un 85% de la adjudicación de fondo externos y también, otras medidas en avances en salud y en bienestar para las vecinas y vecinos de Ñuñoa”, sostuvo respecto a esta posibilidad el presidente de RD, Diego Vela.
En esa línea, sobre la tensión con el PS, aseguró que “tenemos una muy buena relación con el Partido Socialista a nivel comunal en Ñuñoa y también a nivel nacional. Es natural, en los procesos eleccionarios, que personas se hagan disponibles para candidaturas, pero esas definiciones son colectivas y le corresponden a los partidos políticos”.
Con todo, se espera que el PS “baje sus banderas” considerando que su posición es minoritaria en la coalición, tomando en cuenta que la DC respalda la estrategia de mantener los cupos en aquellos municipios liderados por partidos de izquierda o centro izquierda.
“Puntos álgido”
Además de las diferencias por los cupos y las eventuales primarias, hay otros puntos que se deberán resolver durante este mes de marzo.
Uno de ellos es el perfil de candidatos para competir en aquellas comunas donde la derecha hoy esté gobernando.
El Frente Amplio, por ejemplo, ha transmitido que su intención es crecer hacia sectores ruarles y regiones alejadas de la capital.
Pero las aspiraciones de los partidos del FA —que antes de las elecciones ya debería ser partido único— chocan con el pragmatismo que los otros partidos buscan imprimirle a la coalición.
La DC es quizá el partido más fuerte en sectores rurales. Su sólida base de militantes en regiones de la zona centro sur y sur, junto al hecho de ostentar 56 alcaldías —que espera retener— la hacen la mejor opción para competir en dichas zonas.
En todo caso, voces de todos los partidos que componen la coalición consultadas se muestran optimistas respecto a la posibilidad de alcanzar un acuerdo que contente a todas las partes. Y por sobre todo, descartan que la alianza esté en peligro debido a estas diferencias.