En medio de un panorama político que demanda coherencia y unidad, el Frente Amplio se encuentra en un proceso de unificación que busca consolidar su fuerza y brindar respuestas sólidas a los desafíos actuales en materia de educación, pensiones, salud, trabajo, vivienda, defensa de la democracia, feminismo y sostenibilidad ambiental.

Ante este escenario, es crucial que los principios rectores de esta fusión reflejen valores fundamentales como probidad, transparencia, lucha contra la corrupción, socialismo, ecofeminismo y equidad territorial.

La probidad, entendida como la integridad y honestidad en el ejercicio del poder, debe erigirse como columna vertebral de este nuevo partido. La transparencia, por su parte, no solo es un principio ético, sino una herramienta esencial para hacer honor a la confianza depositada en nosotros, por la ciudadanía. En un contexto donde la corrupción ha mermado la credibilidad de instituciones políticas, la unificación del Frente Amplio debe levantarse como un bastión impenetrable contra este flagelo que se ha visto en prácticas de personas que buscan lograr sus fines individuales. Por nuestra parte, nuestro camino es querer avanzar en lo colectivo y de cara a la ciudadanía.

El socialismo, arraigado en la historia del Frente Amplio, debe ser revitalizado y adaptado a las realidades del siglo XXI. Más que un simple rótulo, el socialismo debe traducirse en políticas inclusivas que aborden las crecientes desigualdades sociales y económicas. La unificación del partido debe reflejar un compromiso genuino con la construcción de una sociedad más justa y equitativa.

El ecofeminismo, como un enfoque que vincula las luchas por la justicia social y ambiental, no puede ser ignorado. La unificación del partido debe ser una oportunidad para consolidar políticas que respeten y protejan tanto a las personas como al medio ambiente, que pongan la vida y los cuidados en el centro. La equidad territorial, a su vez, exige medidas que aborden las disparidades regionales, garantizando que todas las áreas del país reciban atención y desarrollo equitativo.

En este proceso de unificación, es imperativo reflexionar sobre la naturaleza del partido resultante ¿Queremos un partido que conecte con la ciudadanía, trabajando con y para las personas? ¿O nos arriesgamos a convertirnos en un partido asistencialista, clientelar, subyugado a intereses particulares y alejados de las necesidades reales de la sociedad?

La respuesta a esta pregunta y los cursos de acción futuros determinarán el éxito de la unificación y la relevancia futura del Frente Amplio. Nuestros desafíos implican ser una alternativa de progreso para el país, generando diálogo transversal con actorías territoriales.

La Región de La Araucanía, según datos de la CASEN, se define como la segunda con mayor tasa de pobreza (11,6%) y la tercera con mayor tasa de pobreza multidimensional, alcanzando un 19,8%, por tanto existen brechas a todo nivel, ingresos, educación, acceso a salud de calidad, redes y participación. Es urgente conectar con la ciudadanía, generando conciencia de que deben ser parte de las soluciones a sus necesidades y relevando la importancia de la construcción en comunidad de éstas soluciones.

Por otro lado, siempre existe el riesgo de convertirse en un partido servicial o asistencialista, lo cual no podemos permitir, ya que perderíamos la esencia democrática y transformadora que ha caracterizado al Frente Amplio a lo largo de su historia, y a lo que no estamos dispuestos a renunciar.

En última instancia, la unificación del partido único del Frente Amplio debe ser un ejercicio de autoevaluación constante, donde los valores fundamentales no solo guíen las decisiones políticas, sino que se traduzcan en acciones concretas que impacten positivamente en la sociedad. La consolidación de una alternativa política comprometida con la justicia social, las luchas medioambientales y la equidad territorial será la clave para construir un futuro político sólido y sostenible, es momento de avanzar.

Autores/as de la columna:

• Camila Castro Gutiérrez, Presidenta Regional de Revolución Democrática Araucanía
• Patricia Paillao Millán, Comité Central de Convergencia Social
• Víctor Villar Zúñiga, Encargado Orgánico Electoral del Partido Comunes