COP 28 cierra con sabor amargo: Dictan fin de combustibles fósiles pero con gas para transición
Algo que marcó la recién terminada cumbre por el clima de la ONU, COP 28, fue la vehemencia y unión con que más de 130 países exigieron que el texto de acuerdo explicitara el fin de los combustibles fósiles en una eliminación progresiva de estos.
Y aunque esta mención se logró en el texto, la redacción dejó un sabor agridulce en la sociedad civil, ya que abre la puerta a utilizar “combustibles de transición”, lo que habilita el uso de gas natural, un combustible fósil, en el proceso.
La idea de que el gas natural puede servir como combustible de transición hacia una generación de energía más limpia ha sido puesto en duda por recientes estudios, que muestran que las fugas de gas en el procesamiento de este, lo hacen tan malo como el carbón para el medio ambiente.
Pero sigue siendo el primer texto en una COP que determina que los países deben abandonar de forma justa los combustibles fósiles. “Esta es una señal que las industrias de los combustibles fósiles temían mucho y está en el texto”, destaca la coordinadora de campañas de Greenpeace, Estefanía González.
La inclusión de los combustibles de transición y la “falta de ambición” en el texto fue criticada por autoridades de países del sur global, como la ministra de Medio Ambiente de Colombia, Susana Muhamad, que alertó sobre el riesgo de que “el capital que se necesita para la transición ecológica se desvíe hacia estos combustibles de transición, que siguen siendo combustibles fósiles y que no van hacia la transformación que necesitamos en el tiempo que necesitamos”.
Financiamiento, pero insuficiente
Similar sensación dejaron los aportes anunciados por distintos países contaminantes para el fondo de pérdidas y daños, que también representa una de las principales demandas del sur global por justicia climática de los países contaminantes hacia aquellos que más sufren los embates de eventos climáticos extremos.
Las críticas señalan la desigualdad entre los aportes comprometidos y el nivel de pérdidas monetarias que generan cada año los eventos climáticos extremos, cada vez más frecuentes por el calentamiento global.
“¿Me están cargando? El país que causó una cuarta parte de todas las emisiones en la historia industrial da 17 millones de dólares cuando estamos perdiendo 100 o 200 millones de dólares al año, mínimo, en desastres climáticos”, reclamó por ejemplo el economista Jeffrey Sachs al conocer el aporte de Estados Unidos al fondo.
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Presidencia petrolera
Esta cumbre también ilustró más que nunca cómo la industria de los combustibles fósiles ha logrado infiltrarse en las negociaciones climáticas con lobby y lavados de imagen.
El hecho de que el ejecutivo de una petrolera árabe ocupara la presidencia de la cumbre ya había causado polémica, la que se acrecentó luego de que se filtraran documentos que mostraban los planes del sultán Al-Jaber de utilizar las reuniones climáticas para cerrar negocios petroleros con al menos 15 países.
Además, se conoció que esta cumbre rompió el récord de la cantidad de lobbistas directamente vinculados a intereses del sector de combustibles fósiles que estuvieron presentes en el evento. La alianza “Fuera los Grandes Contaminantes” identificó 2.456 lobbistas petroleros en la cop, lo que cuadriplica la cantidad identificada en la COP anterior en Egipto.
Liderazgo de Chile
Chile, por su parte, ha consolidado su rol de liderazgo regional durante las últimas cumbres del clima, ayudando a empujar metas climáticas cada vez más ambiciosas.
“El llamado que hacemos a Chile, es que ese liderazgo que mostró en la cumbre lo traiga al país, porque la crisis climática no solo es real sino que está afectando mucho a Chile y eso requiere de medidas concretas que están llegando de manera tardía”, apunta González.
La vocera de Greenpeace apunta como principal desafío para el país en esta línea el eliminar el carbón al 2030, “compromiso que aún no llega y que no ha llegado con este Gobierno, que parecía apuntar en esta línea. Estamos hablando de emisiones que generan tremendos impactos en zonas de sacrificio”, alerta.
Además menciona los desafíos del país para adaptarse a las consecuencias de la crisis climática, para lo cual es clave proteger y restaurar los ecosistemas. “Se nos avecina un verano con olas de calor y riesgo de incendios forestales y tenemos que tener una buena gestión de nuestra agua y gestión de riesgo que nos ayude a enfrentar las consecuencias del cambio climático de mejor manera”, concluye.