Las personas con discapacidad también tienen hijos
Recientemente, gracias a un análisis que hicimos con la base de datos del III Estudio Nacional de la Discapacidad (2022), estimamos que alrededor de la mitad de las personas adultas con discapacidad en Chile viven con sus hijos e hijas. Esto corresponde aproximadamente a un millón trescientos mil personas.
Hasta el momento no se tenía ninguna noción de cuántas personas con discapacidad son madres y padres. Es más, en nuestra sociedad suele asumirse que las personas con discapacidad son asexuadas y no reproductivas. Existen discursos muy prevalentes que desincentivan e incluso condenan la reproducción por parte de personas con discapacidad, argumentando que no podrán hacerse cargo de sus hijos o que estos heredarán su condición.
Es preocupante que, en base a los resultados de este mismo estudio, sabemos que el número de personas con discapacidad que vive con sus hijos aumenta a medida que disminuyen los ingresos del hogar. Estas personas tienen mayor costo de vida y enfrentan grandes barreras para participar de la sociedad, por ejemplo, tener un trabajo estable y bien remunerado. Esta información debe ser considerada a la hora de diseñar e implementar políticas públicas.
En los estudios cualitativos que hemos realizado en el marco de Fondecyt DisPar y Núcleo DISCA, hemos comprobado la invisibilización, estigmatización y discriminación que viven madres y padres con discapacidad en nuestro país. Es común que las personas con discapacidad no tengan acceso a educación sexual, que los espacios de salud no sean accesibles y que no se realicen adaptaciones en los espacios escolares.
Por ejemplo, una mujer embarazada usuaria de silla de ruedas puede tener muchas dificultades para subir a una camilla ginecológica, para una madre autista puede ser doloroso llevar a su hijo a una sala de urgencias ruidosa y muy iluminada, para un padre sordo puede ser imposible participar en reuniones de apoderados sin ajustes. A esto se suma el enfrentarse cotidianamente a los prejuicios y estereotipos que asumen a priori la incapacidad de madres y padres con discapacidad para criar y cuidar.
A pesar de todo lo anterior, las personas con discapacidad en Chile viven con sus hijos en una proporción muy similar a la de la población sin discapacidad.
En el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad queremos enfatizar que es urgente que los espacios de salud, educativos, recreativos y todo el personal vinculado a ellos, asuman que la accesibilidad en todas sus dimensiones -de infraestructura, de comunicación e información, actitudinal, ambiental- tiene que ser un estándar mínimo. La maternidad y paternidad de personas con discapacidad debe dejar de considerarse como algo excepcional. No debemos perder el foco de que al no tener entornos accesibles los principales perjudicados son los hijos e hijas de personas con discapacidad.