Legado de los Juegos de Santiago 2023: Deporte para todos o para pocos
Hemos sido testigos de la gestión de recursos y capacidad organizativa de nuestro país en la preparación y ejecución de los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, evento deportivo que ha sido catalogado como el de mayor envergadura que se haya organizado en Chile, y que ha supuesto el éxito de una política pública de grandes eventos deportivos y de alto rendimiento que se ha desarrollado con fuerza en la última década.
Dentro de los beneficios acarreados por Santiago 2023, en lo deportivo el desempeño de la delegación nacional ha sido destacado en el rendimiento con la obtención 79 medallas. Desde el punto de vista social, la ciudadanía se ha volcado en apoyo a nuestros deportistas colmando las galerías con históricas convocatorias para algunos deportes, reforzando la unidad e identidad nacional. En lo económico, se han incrementado las oportunidades de trabajo, comercio, negocios, inversiones privadas y del turismo, transformándose en una oportunidad para promocionar a Chile como destino turístico y una mejora de nuestra alicaída marca país.
Por lo que Santiago 2023 se constituye como una oportunidad única para iniciar un nueva etapa e impulso para las políticas públicas de actividad física y deporte, por lo que quisiera aprovechar de proponer una sana discusión entorno a tres legados en el ámbito político deportivo estructural para nuestro país.
Legado Deportivo Municipal: Iniciar un proceso de reforma de la Ley Orgánica Constitucional de Municipalidades, para que la función deportiva sea privativa de las municipalidades dotándolas de institucionalidad, estructura y presupuesto permanente que permita la ejecución de programas de promoción de la actividad física y deportiva en la población local.
Legado Deportivo en los Gobiernos Regionales: Delegar competencias de la función deportiva en los Gobiernos Regionales, que permitan la ejecución de políticas públicas regionales, que respondan a las necesidades y particularidades de cada contexto territorial en colaboración con las estructuras municipales y promover un Sistema de Competencias Deportivas Regionales, que fortalezca el carácter e identidad del deporte competitivo en el nivel regional.
Legado en la Educación: Hoy el Ministerio de Educación tiene un alcance sobre una matrícula de más de 4 millones de niños, niñas y jóvenes. Por lo que esta cartera es la que debe liderar y fortalecer los Juegos Deportivos Escolares con una oferta permanente, que permita mediante su práctica y encuentros deportivos el desarrollo formativo y de los valores olímpicos en la edad escolar, cambiando el foco en el rendimiento y de poco alcance que prevalece en el modelo actual promovido por el IND. Por otra parte, como ya solicitado distintas organizaciones y colectivos, se debe reestablecer la obligatoriedad de la Educación Física para 3º y 4º Medio. En tanto las Instituciones de Educación Superior, deben avanzar en la creación del “crédito legado” que reconozca la dedicación de sus deportistas universitarios a su actividad competitiva y establezca al menos 2 asignaturas obligatorias de educación física o deportivas, que permitan fortalecer la formación integral de sus estudiantes, además de contribuir a su salud física y mental.
Es de esperar que nuestras autoridades y representantes entiendan que los Juegos de Santiago 2023, un recurso de alta visibilidad y que ha permitido proyectar la impresión de logro a la opinión pública, deben ser capitalizados en una planificación estratégica, con una mirada en el mediano y largo plazo, sobre los beneficios asociados a este evento deportivo y, en concordancia, con el desarrollo sostenible del territorio, generando estrategias de promoción del deporte, comprendidas desde las necesidades reales de la comunidad local, regional y educativa.