El radical cambio de vida de Johanna Hernández, condenada por el crimen del profesor Nibaldo
Con más de cuatro años presa en el Centro Penitenciario Femenino de Santiago (CPF), Johanna Hernández cumple condena de presidio perpetuo calificado por el parricidio de su exesposo, el profesor Nibaldo Villegas, ilícito a partir del que su privación de libertad la ha desafiado a embarcarse en distintos proyectos al interior del penal.
Y es en este contexto que esta mujer se encuentra en el módulo de “custodia directa”, donde incluso comparte celda con María del Pilar Pérez (la Quintrala), y otras nueve internas, situación que movilizó a su defensa a presentar un amparo argumentando que en este sector “no existen programas tendientes a la reinserción social”, motivo por el que se solicitó su traslado al “módulo católico” de la ex cárcel de mujeres, detalla Mega evidenciando el cambio de vida de Hernández, quien incluso busca volver a estudiar.
De hecho, la representación de la condenada aseguró que fue invitada a esa unidad por la capellana de la Pastoral del CPF San Joaquín, Nelly León, en respuesta a su buen comportamiento. Paralelamente, sinceró que entre los nuevos proyectos de la condenada también está “ingresar al preuniversitario para poder estudiar una carrera en la educación superior”.
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Lamentablemente para sus planes, el 13 de octubre Gendarmería desestimó el cambio asegurando que el traslado “no es factible”, dado que Hernández requiere de un resguardo distinto por la exposición mediática del caso que protagonizó.
Incluso, se planteó que el traslado implica un “riesgo efectivo y concreto no solo a la integridad física y psíquica de Hernández, sino que también se extiende a todas las internas” del módulo.
Recibe un sueldo de $460 mil
Sandra Zapata, alcaide del penal, aseguró que un proceso espiritual de reinserción social se puede hacer perfectamente en el módulo de “custodia directa”, detallando además que Hernández asiste regularmente a misa, mientras que el cambio de sección al que aspiraba no depende de una invitación que le haga una religiosa externa a Gendarmería.
Y entre los antecedentes de la nueva vida de Hernández que entregó Zapata, comentó que tiene un trabajo remunerado en el taller de tejido Amigorumie, que implica un pago de $460 mil desde de febrero de 2021.
Incluso, detalló que está en lista de espera para sumarse a programas de intervención especializada.
En consecuencia, la mujer condenada a presidio perpetuo calificado en mayo del 2019, por el asesinato del profesor Nibaldo Villegas junto a su amante Francisco Silva en Villa Alemana, ahora tendrá que esperar la determinación que adopte el tribunal de garantía en una audiencia agendada para el 23 de octubre.