Fentanilo, la droga zombie que ya circula en Chile y puede matar a una persona en segundos

Fentanilo, la droga zombie que ya circula en Chile y puede matar a una persona en segundos

Por: Carolina Ceballos | 19.08.2023
"Es una grave amenaza para la salud pública. De alcanzar la magnitud que esta epidemia tiene actualmente en EEUU, los opioides podrían llegar a causar cinco mil muertes al año en nuestro país, considerando el tamaño de nuestra población", advierte Carlos Ibáñez, psiquiatra y jefe de la Unidad de Adicciones de la Clínica Psiquiátrica Universitaria de la Universidad de Chile.

Durante las últimas semanas, en redes sociales se ha viralizado una serie de registros de barrios de Estados Unidos con imágenes tan desoladoras como reveladoras de los efectos del fentanilo, la llamada "droga zombie" que puede terminar con la vida de una persona en segundos y que en nuestro país ya circula no por su "importación" desde otros países, sino por su ilegal salida desde recintos hospitalarios, como lo advierte Patricio Navarro, jefe de la Brigada Investigadora de Sustancias Químicas Controladas (Brisuc) de la PDI.

"El fentanilo es un fármaco que tiene potencial de abuso, es un anestésico y analgésico de uso lícito, de mucho uso en la industria médica nacional para las dolencias. Cuando hablamos del ingreso del fentanilo a Chile estamos hablando de su ingreso al tráfico ilícito de drogas, porque también existe una industria de fabricación ilícita de esta sustancia precisamente para ser destinada al tráfico ilícito de drogas, esta industria es la que se da precisamente en el hemisferio norte, en el norte de México, donde organizaciones criminales se dedican a sintetizar este producto para destinarlo al tráfico ilícito", asegura apuntando al rédito económico en que se traduce su comercialización.

Respecto de su circulación en Chile, sincera que de momento no se ha detectado "tráfico de fentanilo ilícito, no hemos encontrado personas que estén ingresando fentanilo ilícito".

Sin embargo, agrega, lo que se está generando es una circulación social cuyo origen está en los recintos asistenciales, específicamente en ampollas destinadas a tratamientos específicos.

"Hemos detenido a algunas personas que trabajaban en hospitales públicos y sacaban el fármaco del hospital", detalla al tiempo que alerta de sus fatales consecuencias. "Los efectos que tiene, al ser un depresor del sistema nervioso, son súper peligrosos. Tiene unos límites tóxicos súper bajos, con dos a tres milígramos un adulto puede fallecer, porque se produce depresión respiratoria, es decir, se para su respiración", detalla.

Personas mueren mientras se inyectan

"Solo unos cristales, o que un comprimido esté mal dosificado, puede ser la cantidad suficiente para que una persona lo ingiera y fallezca", detalla Navarro asegurando que el deceso se puede producir segundos después de la ingesta de una dosis, que muchas veces se mezcla con otras sustancias, configurando un cóctel de aún mayor letalidad

"Hemos tenido casos en el hemisferio norte, donde una persona se inyecta una sustancia contaminada con fentanilo, se empiezan a inyectar, no terminan de inyectarse y caen fallecidas", ilustra antes de advertir que la muerte se puede producir involuntariamente por contaminación de un ambiente a través de su errada manipulación.

Es una de las drogas más peligrosa que circula en el mundo, ratifica Navarro a renglón seguido. "Esto es lo que se llama la crisis de los opioides en el hemisferio norte, el año pasado más de 100 mil personas fallecieron por sobredosis", asegura el experto.

PDI en alerta

"Tuvimos una reunión con la DEA (Fuerza de administración antidrogas de EE.UU.) en febrero", comenta Navarro dando cuenta de la envergadura del tema y la preocupación que genera la circulación de fentanilo.

Todavía sus incautaciones son menores en relación a otras drogas sintéticas que circulan" en nuestro país, asegura aclarando que, de momento, el fentanilo responde a un mercado incipiente. "Lo cual no implica que no tengamos que estar atentos, de hecho lo estamos", transparenta.

"El fentanilo no representa un peligro para Chile, el fentanilo representa un peligro por la potencia que tiene. Por lo tanto, que esté circulando un fentanilo de fabricación ilícita con el riesgo de causar una intoxicación aguda, es un riesgo asociado a la naturaleza de la droga propiamente tal", complementa.

De hecho, comenta una situación detectada por la PDI en medio de su monitoreo de la ruta del fentanilo. "Vimos en una investigación que una enfermera vendía las jeringas listas para su aplicación en Chile", revela.

¿Cuánto cuesta?, Navarro detalla que "una ampolla (10 milílitros) en el mercado ilícito, según investigaciones nuestras, ronda aproximadamente los $40 mil. Una persona puede inyectarse más de una ampolla o tener interacciones con otros medicamentos, estar consumiendo clonazepam, alcohol, eso es lo que eventualmente ocurre".

"Es una droga de preocupación"

"Es una droga de preocupación, los análisis indican que ese fenómeno se va a trasladar a otras partes del mundo", agrega no descartando que este se genere a nivel local, como ocurre en el hemisferio norte.

Desde el ámbito médico, Carlos Ibáñez, psiquiatra y jefe de la Unidad de Adicciones de la Clínica Psiquiátrica Universitaria de la Universidad de Chile, comenta que cuando hablamos de fentanilo, hablamos de "un tipo de sustancia de la misma familia que los derivados del opio -por lo que se llaman opioides-, entre los que se encuentran la morfina y la heroína. El fentanilo es un opioide sintético 100 veces más potente que la morfina y 50 veces más potente que la heroína".

Consultado respecto de la envergadura de la amenaza para la población que representa esta droga, el experto transparenta que "todos los opioides tienen muchos efectos adversos, por lo que sólo pueden ser indicados y supervisados por un médico. El principal riesgo es la muerte por depresión respiratoria, situación que está costando a la vida a decenas de miles de personas por año en EE.UU. en la actualidad. Muy relacionado con lo anterior, está la severa adicción que tienden a producir y de la cual resulta especialmente difícil recuperarse".

Otro factor que Ibáñez releva, apunta a las características de nuestro territorio. "Chile es un país con altos consumos de sustancias ilícitas y comparativamente más rico que nuestros vecinos. El narcotráfico se ha ido instalando en muchos territorios y, gracias a que nuestras costas y fronteras son muy amplias, somos tanto un país de tránsito  como de destino para las sustancias ilícitas".

Grave amenaza para la salud pública

De hecho, releva que "la posibilidad de ingreso del fentanilo es un riesgo que se debe considerar seriamente, debido a los potenciales efectos catastróficos para la salud pública".

¿Cuál debiera ser la estrategia de abordaje desde el Ejecutivo para enfrentar esta problemática? Para Ibáñez "es muy importante que el Sistema de Alerta Temprana a Drogas (SAT), esté funcionando y muy atento frente a esta amenaza. La coordinación interinstitucional (SENDA, Ministerio del Interior, las policías, fronteras, los institutos de Salud Pública y Médico Legal, entre otros) es clave para detectar a tiempo y evitar que ingrese y se distribuyan por el país sustancias de este tipo.

"Desde el sector salud, sería importante contar con registros actualizados de los casos de sobredosis no mortales por opioides y de las muertes ocasionadas por estas sustancias. Actualmente no contamos con esa información en nuestro país, y podría ser fundamental. Además de impedir que ingrese al país, también debiese avanzarse en la implementación de tratamientos específicos para la adicción y para las intoxicaciones por opioides, como las terapias de mantención (entre otros) y la administración de naloxona (para revertir las sobredosis) respectivamente", agrega.

En Chile podrían morir cinco mil personas al año

Por último, el experto insiste en los riesgos que representa la ingesta de esta sustancia, apuntando a la crisis que este tipo de fármacos está generando alrededor del mundo, con predominio actual en el hemisferio norte.

"Es una grave amenaza para la salud pública. De alcanzar la magnitud que esta epidemia tiene actualmente en EEUU, los opioides podrían llegar a causar cinco mil muertes al año en nuestro país, considerando el tamaño de nuestra población", concluye Ibáñez.