De “paro ascendente” fue catalogada la paralización de actividades de los profesores agendada para este miércoles 26 de julio con un paro de 24 horas, pero que se extenderá por 48 horas durante los días 2 y 3 de agosto. 

Según el Colegio de Profesores, la medida de presión responde a la nula respuesta del Ejecutivo ante el petitorio levantado hace un año por el gremio liderado por Carlos Díaz, desde donde insisten que el gobierno solo ha entregado “frases de buena crianza” que, de ninguna manera satisfacen sus demandas.

Específicamente, el profesorado apunta a la urgencia de saldar temas como la deuda histórica, poner fin al agobio laboral y el pago del bono al retiro, entre otros.  

Municipales y particulares subvencionados

Si bien desde la subsecretaría de Educación, Alejandra Arratia, aseguraron que se está avanzando en solucionar estas diferencias y buscar acuerdos con el gremio, expresó la “preocupación” del Ejecutivo ante la pérdida de clases de los estudiantes en que se traducirán las movilizaciones anunciadas. 

Sobre todo dado que desde el magisterio estiman que la jornada tendrá una masiva adhesión.

"La paralización generalmente la llevamos adelante en función de los establecimientos municipales. Sin embargo, se pliegan servicios locales de educación. Se ha anunciado ya que muchísimas organizaciones de trabajadores de colegios particulares subvencionados, también se plegarán a esta paralización", aseguró este martes Díaz.

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No hay otro camino

En diálogo con El Desconcierto, el presidente del magisterio aseguró que "hay un ambiente de mucha expectación respecto de lo que será la movilización del día de mañana a nivel nacional. Después de mucho tiempo, las profesoras y profesores salimos a la calle, salimos a la calle a demandar por nuestras legítimas demandas y, en ese sentido, hemos tenido reportes a lo largo y ancho del país que dan cuenta de una importante cantidad de docentes, de establecimientos educacionales que a lo largo y ancho de Chile se suman a esta paralización".

Consultado por su recomendación a los responsables de los estudiantes, sincera su necesidad de que exista empatía.

LLamado a apoderados

"Primero, a los padres y apoderados es importante solicitarles que entiendan lo que va a ocurrir mañana. Nuestra paralización tiene que ver con tener mejores condiciones para nuestros estudiantes. La educación chilena requiere cambios y cambios profundos".

"El modelo de educación que hoy existe, perjudica los aprendizajes de nuestros estudiantes, por ello después de más de un año de venir conversando con la autoridad, no nos ha quedado otro camino que paralizar. Pero, además de ello, señalar que hemos tomado todos los resguardos, por supuesto que así ha ocurrido en todo Chile para que nuestros estudiantes que necesiten y requieran asistir a los establecimientos para alimentarse el día de mañana, por supuesto los establecimientos deben de estar en condiciones para entregar esta alimentación", comenta luego.

Respecto de la envergadura de la movilización y la estimación que hace el gremio, Díaz transparenta son más de cinco mil los recintos estudiantiles que se sumarán al llamado de atención al Ejecutivo.

"La proyección es que más de 100.000 serán los profesores que paralizarán mañana. Las cifras más concretas y exactas las veremos mañana por la tarde en nuestro punto de prensa, pero indudablemente que a la luz de los antecedentes y los reportes que tenemos, sobre 100.000 docentes el día de mañana paralizarán sus actividades".

Sin contacto con autoridades

Díaz también confirmó que hasta el cierre de esta edición no habían mantenido contacto con la autoridad central.

"No, no hemos tenido contacto directo con las autoridades del Ministerio de Educación, más bien hemos estado planteando nuestros puntos de vista a través de los medios de comunicación, ellos lo tienen muy claro, nosotros se lo expresamos en la última conversación que sostuvimos con la subsecretaria, esperamos que después de la paralización del día de mañana, exista alguna comunicación de parte del Ministerio y la posibilidad de encontrarnos".

"Nosotros estamos plenamente disponibles al diálogo, pero tenemos un cronograma muy claro que comprende, además, la paralización la próxima semana, los días miércoles y jueves 2 y 3 de agosto y, posteriormente, un paro nacional indefinido. Quien tiene que responder hoy es el Ministerio de Educación, si quiere que demos curso pleno a ese cronograma que hemos preparado, o efectivamente responde a partir de situaciones concretas con fechas perentorias. Y sobre todo, dando solución a las problemáticas que hace más de un año venimos planteando a la autoridad", recalca el presidente del magisterio.