Débora Solís Martínez es la directora ejecutiva de la Asociación Chilena de Protección de la Familia (Aprofa), organización con más de 50 años de trayectoria en la defensa de los derechos sexuales y derechos reproductivos de todas las personas.

La psicóloga y educadora diferencial es la cara visible de la ONG, y en el marco de este 8 de marzo, entrega su perspectiva frente a las políticas públicas del Ejecutivo, destacando que “ha dado pasos” hacia el feminismo.

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-¿Cuál es tu evaluación de la agenda del gobierno en materia de políticas de género y mujeres durante su primer año?

El gobierno del Presidente Gabriel Boric ha innovado en la implementación de políticas de género. Esto se anunció en su programa de gobierno y desde el primer día promovió una política de género que no solo se traducía en acciones positivas hacia las mujeres, sino que logra incorporar a la política de género a las diversidades, lo que en sí mismo ya constituye una muy buena señal.

En ese sentido, la evaluación es positiva, sin embargo somos conscientes que queda un largo camino por recorrer para asentar bases estructurales que garanticen los avances, más allá de los cambios de gobierno. Para ello un desafío importante es contar con el apoyo del congreso y esa es también una tarea de quienes gobiernan.

 -¿Se podría decir que este ha sido un gobierno feminista? ¿Por qué?

Según nuestra perspectiva este gobierno busca ser feminista, y ha dado pasos en ese sentido. El protagonismo que ha alcanzado el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género es un hecho completamente nuevo y simbólico, porque ha logrado posicionar temáticas y hacer referencia a cuestiones sociales que generalmente pasaban desapercibidas sin incorporar la perspectiva de género en ellas.

El feminismo no es una categoría de sencillo abordaje, ser feminista es una forma de ver la vida y de vivirla. El feminismo es un continuo muy exigente en países como el nuestro donde las relaciones humanas aun se conciben de manera rígida y conservadora.

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-¿Cuáles crees que serán los desafíos por delante para el mundo político y la ciudadanía en esta materia?

Creemos que para el gobierno, el principal desafío en esta materia sigue siendo ir a mover estructuras que obstaculizan el avance de las personas, por otras energías que faciliten el cambio y promuevan mejoras en la vida de todos y todas quienes vivimos en Chile.

Se trata de ir a lo estructural. Por ejemplo, avanzar en una ley que garantice que desde la primera infancia se reciba información con evidencia científica y adecuada a las etapas del desarrollo y que por sobre todo constituya una verdadera oportunidad de convertirse en personas reflexivas, críticas, con capacidad de decidir, etc.

Hoy como país tenemos una nueva posibilidad de construir una constitución que dé cabida a todas las personas, identificando una base de garantías de Derechos Humanos que sea irrenunciable.

Los derechos sexuales y reproductivos deben estar en el debate, como posibilidad para que las personas puedan recibir el acceso, e iguales oportunidades para decidir sobre sus cuerpos.