Irina Karamanos: “Me guste o no el cargo, se trata de revisar si es acorde a los tiempos”
En medio de una ronda de entrevistas que está ofreciendo Irina Karamanos, coordinadora sociocultural del Ejecutivo, la socióloga y activista feminista conversó con medios como El País y Cooperativa, donde aludió al cargo que está próxima a dejar, de acuerdo a sus palabras, este año.
“La decisión de habitar el cargo fue un desafío muy grande”, admitió la profesional que prepara su salida del Ejecutivo en el que mientras se mantendrá abordando distintos desafíos.
“Al tomar la decisión, hubo críticas. Y lo sabíamos. Internamente fue un debate muy interesante. ¿Se puede interrumpir una continuidad al ingresar como agente político a un espacio poco convencional para desplegar el feminismo?”, sostuvo aludiendo a la responsabilidad que asumió en marzo.
Sobre la decisión que tomó, comentó cómo fue que visualizó el rol que adoptó atendiendo su vínculo con el Presidente Gabriel Boric. "Consideramos que requería de un liderazgo político para evitar que, si no lo habitábamos, se pudiera reproducir mecánicamente hasta el infinito", detalló.
"Por eso preferimos ingresar y mirar qué había dentro, para luego proponer las transformaciones. Y hay que estar muy pendiente de cuál es el ritmo de los cambios culturales al plantear la transformación”, agregó luego Karamanos respecto de su trabajo, cuestionado en primera instancia incluso desde el feminismo.
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Si en el futuro se reproducirá o no la figura de la primera dama de la que ella se ha desvinculado, Karamanos dijo que al menos ella está segura de intentarlo, sin embargo, “hacer declaraciones muy tajantes o megalómanas es desconocer cómo opera la historia. No caería en esa trampa. Pero la manera más cercana de evitar la reproducción de dicha tradición, era asumiéndola y modificándola desde dentro”.
“Lo que venimos a plantear, habiendo analizado las posibilidades, es una modificación en lo institucionalizado que está el papel de primera dama en Chile. Que esté dentro del Palacio, que vaya a trabajar a la interna del gobierno, que tenga fundaciones que preside, son elementos que anclan a la figura en un entramado de mucha injerencia y espacios de arbitrio. La figura de primera dama no es tan democrática como esperamos que sean las instituciones”, aseguró posteriormente.
Y agregó que su principal apuesta, para ella y quienes sean parejas de un presidente o presidenta, "es que haya una libertad respecto de la decisión de cuánto se quiere involucrar en el papel protocolar y diplomático y que pueda continuar con su trayectoria profesional".
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Respecto del rol, dijo que una alternativa es desplazar su ámbito de acción hacia otros espacios. “Nos podemos mover a un lugar en que aquella figuración pública pueda visibilizar algunas temáticas, problemáticas, poner el foco en algún grupo de la población o jugar un papel protocolar y diplomático", dijo. apuntando a una versión más moderna de quien ocupa este cargo que le demandó una reflexión importante previo a asumirlo.
"Para nosotros lo más coherente era conocer primero por dentro la estructura, el espacio de primera dama, ser primera dama y con eso conocer a cabalidad y trabajar con todas las personas e instituciones que están adentro de ese espacio para poder, responsablemente, realizar cambios", admitió Karamanos luego.
Incluso, sinceró que no considera un error haber llegado a La Moneda. "No me arrepiento para nada de haber tomado el cargo, sabía que iba a levantar críticas porque es un espacio poco común para una feminista al cual entrar, pero eso no fue contradictorio en sí mismo".
En este sentido, reflexionó respecto de las posibilidades que este ofrece. "No es que a mí personalmente me guste o no me guste el cargo. No se trata de mí, se trata de políticamente poder revisar si es que es acorde a los tiempos o no y esas cosas que no lo sean poder modificarlas", dijo.