Berlusconi descarta contactos con embajador ruso en Roma durante crisis del gobierno
El líder conservador y tres veces primer ministro italiano italiano Silvio Berlusconi negó hoy haber mantenido contactos con el embajador de Rusia en italia la semana pasada, durante la crisis que terminó con el gobierno de Mario Draghi, como publicó este viernes el diario Repubblica.
"Nunca me he reunido con el embajador ruso ni he mantenido ninguna conversación telefónica con él", dijo Berlusconi en una escueta nota para desmentir la información que asegura que el magnate telefoneó el pasado miércoles día 20, cuando en el Parlamento se decidía la continuidad de Draghi, al embajador Serguei Razov.
Según Repubblica, Berlusconi contó a algunas personas que fueron a verlo a su casa romana de Villa Grande que había hablado con Razov. "Me explicó sus razones, lo que hizo (el presidente ucraniano Volodomir) Zelenski, me dijo que fue Ucrania la que causó 20.000 víctimas en las zonas en disputa. Y que la invasión era necesaria porque el riesgo era que Ucrania atacara a Rusia".
La información se publica un día después de que otro diario, La Stampa, revelara que, según los servicios secretos, un asesor del líder ultraderechista Matteo Salvini, socio de Berlusconi en la coalición de derechas junto a la ultra Girogia Meloni, mantuvo contactos con un funcionario de la Embajada rusa en Roma sobre la posible retirada del Ejecutivo italiano de los ministros pertenecientes a su partido, la Liga.
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Estas revelaciones sobre la posible influencia del presidente ruso, Vladimir Putin, en la caída del gobierno italiano fueron calificadas de "inquietantes" por el líder del Partido Demócrata (PD), la principal formación progresista del país, que pidió la intervención del Comité Parlamentario para la Seguridad de la República (Copasir), que controla los servicios de Inteligencia.
Sin embargo, la autoridad delegada para la seguridad de la República rechazó después la implicación de los servicios de Inteligencia en el asunto, asegurando que "carece de todo fundamento", como había anunciado el propio Salvini.
Draghi dimitió el jueves 21 después de que la Liga de Salvini y la conservadora Forza Italia (FI) de Berlusconi, junto al populista Movimiento 5 Estrellas (M5S) de Giuseppe Conte, le retiraran su apoyo parlamentario y obligaran a la convocatoria de elecciones anticipadas tras forzar la caída del Ejecutivo de "unidad nacional".
El PD y el centrista Italia Viva (IV) solicitaron una sesión informativa urgente en la Cámara de Diputados, mientras el ministro de Exteriores en funciones, Luigi Di Maio, también pidió explicaciones al líder de la Liga y advirtió de la necesidad de "tener cuidado con las influencias rusas en esta campaña electoral".