Paulina Vodanovic, candidata a presidir el PS: “El partido es clave para reforzar al gobierno”
El próximo 15 de mayo, la militancia del Partido Socialista (PS) votará para renovar a la mesa directiva, eligiendo un nuevo Comité Central, para dar paso a los dirigentes que acompañarán a la administración de Gabriel Boric durante los próximos dos años, y al término del proceso constituyente. En una elección que será paritaria, donde las y los militantes votarán por un hombre y una mujer, las listas “Unidad Socialista”, “Socialistas socialistas de izquierda” y “Socialistas por un cambio necesario”, disputarán, este domingo, el mando del partido oficialista. De las 36 mujeres que se postulan, el nombre de una militante resuena como uno de los favoritos para dirigir la colectividad.
Paulina Vodanovic Rojas lleva el “socialismo en la sangre”, en sus propias palabras. Hija de Hernán Vodanovic y nieta de Óscar Schneke, históricos socialistas, la abogada y presidenta de la fundación Horizonte Ciudadano, el think tank de la exPresidenta Michelle Bachelet, se presenta como integrante de “Unidad Socialista”, junto con Juan Pablo Letelier, Fidel Espinoza, Camilo Escalona y Alfonso de Urresti, además de las diputadas Daniella Cicardini y Emilia Nuyado. Apuntando a apoyar el trabajo de la Convención Constitucional, y respaldar, con lealtad y una crítica constructiva, al gobierno actual.
Desde Antofagasta, la otrora subsecretaria para las Fuerzas Armadas detalló a El Desconcierto cuál será la postura que tendría la mesa directiva de imponerse su lista frente a la contingencia actual, repasando además las fricciones del PS con la administración de Boric, y la experiencia que puede llevar al partido a reforzar al oficialismo. Para Vodanovic, “debemos estar muy unidos” para apoyar el proceso constituyente porque “nuestro adversario no está al lado, está al frente”. De todas formas, la abogada evalúa que ha habido desigualdad de trato del gobierno hacia su partido, “sobre todo en las regiones”.
[Te puede interesar] Elizalde y Acuerdo de Escazú: “Hay mayoría en ambas cámaras para aprobar esta iniciativa”
-¿Qué la motivó a presentarse a las elecciones del partido?
Soy una militante bastante antigua, tengo 30 años de militancia en el partido, y creo que estamos en un momento histórico, en lo político, pero también internamente en un momento en el que hay que tomar ciertas decisiones y conducción política. Compañeros y compañeras de las distintas regiones del país están impulsando esta candidatura porque vemos que hay que renovar los liderazgos, los estilos de hacer política, con un sentido de responsabilidad respecto de lo que significa hoy día estar apoyando el gobierno.
-¿Qué diferencia su postura a la del resto de los candidatos?
Soy una persona que ha estado involucrada en la política desde toda mi vida, porque yo soy hija, sobrina y nieta de incluso uno de los fundadores del partido, Óscar Schnake, por lo tanto, llevo el socialismo en la sangre, pero creo que no haber estado en la primera línea de la toma de decisiones, dentro del partido, te hace ver las cosas con la distancia necesaria para poder hacer los cambios que hoy día, también desde el partido, hay que implementar, como mayor democracia interna, y participación de las bases.
Siento que las bases hoy día están muy postergadas, por lo tanto, ese es un cambio, en el caso mío, generacional. No vengo de una cúpula, sino que soy una militante de base que tiene también la experiencia política, de los años de militancia, de haber estado en el Comité Central en dos ocasiones, de haber tenido un cargo de gobierno, y sobre todo, de ser una abogada que ha ejercido privadamente la profesión. Tengo esa independencia respecto del partido, porque el único cargo público que he tenido fue en el segundo gobierno de la presidenta Bachelet. No soy una persona que toda la vida haya estado vinculada a los gobiernos, y tengo una distancia respecto de ese tema.
-Y en ese sentido, ¿cuáles son las propuestas más importantes que destaca del programa de la lista?
Lo primero, que vayamos avanzando hacia una articulación interna, un trabajo interno mucho más de unidad. La lista se llama “Unidad Socialista” y la verdad es que hoy día nuestro partido necesita mucho volver a tener una fraternidad entre compañeros y compañeras a lo largo de Chile, que nos dé posibilidades de discutir política, disentir en las distintas líneas políticas que podemos tener, pero con respeto, y que eso no se transforme en rencillas personales. Entonces, en primer lugar, recuperar la fraternidad; en segundo, fortalecer la democracia interna del partido, permitiendo la amplia participación de las bases y también dándoles roles de mayor importancia a la orgánica interna, a comunales, provinciales, regionales, etcétera.
En lo político, dentro de lo que es la línea política que uno debería fijar, fortalecer e integrar a todos los sectores del partido, tanto en la mesa como en la Comisión Política, pero donde exista una verdadera participación, y donde las definiciones se adopten en los organismos regulares, no que sean adoptadas por uno o más mandatarios del partido sin consulta con las instancias regulares. Falta mucho por fortalecer esa participación, creo que la horizontalidad en esto que podemos establecer estando en la mesa, es una característica que me distingue respecto del resto.
-¿Cuál debiera ser la postura del Partido Socialista dentro del gobierno de Gabriel Boric?
Al igual que como ha sido en la Convención Constitucional el rol que ha jugado nuestro colectivo socialista, el de nuestro partido es fundamental hoy en día para el gobierno. Somos un partido que tiene historia, que tiene una trayectoria, que tuvo a nuestro Presidente Salvador Allende, que ha gobernado en coalición siempre desde la Unidad Popular hasta Bachelet II, y por lo tanto esa experiencia nos sirve para ser un eje de articulación del socialismo democrático, que se potencie como un puente entre las dos coaliciones al interior del gobierno. El partido es clave para reforzar con nuestra gente, con experiencia, al gobierno en la toma de decisiones y en el apoyo.
Eso no quiere decir solamente que estemos incorporados en el gobierno con cargos; también tenemos que tener una voz que sea escuchada en igualdad de condiciones con la otra coalición.
-¿Comparte el diagnóstico de senadores como Alfonso de Urresti, sobre que la “arrogancia” del Frente Amplio, o de Giorgio Jackson, podría perjudicar al gobierno?
Para mí la política no debe ser basada ni es descalificaciones ni en acentuar características personales. Creo que la política se hace dialogando, buscando acuerdos, y mí postura respecto del gobierno es darle un apoyo leal, con crítica por cierto, porque también parte de la lealtad es poder hacer críticas, pero deben hacerse en las instancias que corresponde: en privado, y sin publicidad, porque sino estamos dando material para comentarios que no necesariamente van a conducir a la solución del problema. Hoy día tenemos graves problemas en el país que son a los que nos debemos dedicar: el tema de la seguridad, las migraciones del norte -hoy estuve en Antofagasta y es un tema grave-, está la crisis permanente en La Araucanía. Esos son los problemas en los que debiéramos estar, como Partido Socialista, preocupados de impulsar agendas transformadoras, de ponernos a disposición del gobierno, más que estar en disputas personales.
-¿Cree que hay “desigualdad de trato” del gobierno hacia el Partido Socialista?
Creo que la ha habido, sobre todo en regiones. He podido recorrer prácticamente todo Chile, desde Iquique hasta Puerto Montt, y quiero decir que, la verdad, quienes están colaborando con el gobierno se sienten, en muchos casos, maltratados por los equipos en las reparticiones donde les toca trabajar. No es un problema solamente de cúpula, es un problema de trato, porque finalmente a los cargos intermedios también llega esa impresión.
En la política tenemos que dejar de maltratarnos. Hay frases que quedan instaladas, que a lo mejor se han dicho en un contexto, pero luego solo queda una frase, entonces tenemos que ser cuidadosos. Ambos bloques que estamos integrando el gobierno queremos el éxito de esta gestión, queremos hacer cambios importantes en Chile, tenemos que apoyar el proceso constituyente, por lo tanto, debemos estar muy unidos porque, finalmente, nuestro adversario no está al lado, está al frente.
-Sobre el proceso constituyente, ¿el partido debería expresarse a favor del Apruebo de salida pública y prontamente?
Como digo, he tenido oportunidad de recorrer todo Chile, y en donde no he podido visitar he estado en reuniones de zoom, y puedo señalar que la gran mayoría, por no decir todos los socialistas, están por el Apruebo. Entendiendo que puede que este proyecto de Constitución no sea perfecto, pero sin duda consagra algo que para los socialistas es esencial: el Estado social y democrático de derecho.
-Y, por ejemplo, la “funa” que hubo hacia los constituyentes socialistas en la Convención, ¿cree que afectará establecer una postura concreta hacia alguna de las opciones del plebiscito de salida? ¿Cómo vio ese episodio?
Yo incluso escribí un artículo sobre este tema, y tiene que ver con lo que hablamos antes, el trato en la política. La política es un oficio noble, pero que finalmente quienes participan de ella también la denostan. Nosotros tenemos que respetarnos, tenemos que establecer diferencias políticas por los canales adecuados, respetuosamente, y disentir cuando hay diferencias, pero no en la forma en que se expresan, particularmente, en la Convención. Creo que quienes están allí, muchos de ellos, no comprenden que su labor es esencial para el éxito de este proceso, y se trensan en pugnas que finalmente no llevan a nada.
Como socialistas vamos a tener una línea, la hemos tenido durante la Convención Constitucional y la vamos a mantener, que es avanzar hacia una nueva Constitución, pero que esa Constitución también respete profundamente los principios de la democracia.
-Finalmente, ¿tiene algún mensaje o reflexión que entregar?
Este domingo 15 de mayo la militancia socialista va a elegir a sus nuevas autoridades, un Comité Central que es el órgano más representativo del Partido Socialista, pero que necesitamos que tenga renovación, que tenga un estilo nuevo de hacer política, y donde esté representada la diversidad de nuestro partido. Espero formar parte de este Comité Central y poder instalar un estilo mucho más cercano, horizontal o de acogida a los compañeros y compañeras de las regiones, donde todos seamos igual de importantes.