Comisión de Venecia apela a que la futura Constitución de Chile defienda la paridad
La Comisión de Venecia, órgano consultivo del Consejo de Europa en materia constitucional, recomendó a la Convención Constitucional de Chile que incluya en la Carta Magna que elabora la perspectiva de género, la paridad y los derechos indígenas.
La recomendación, adoptada este viernes en la sesión plenaria celebrada en la Gran Escuela de San Juan Evangelista de Venecia y publicada este sábado, había sido requerida en enero por la entonces presidenta del Senado, Ximena Rincón, sobre algunos temas de la Convención.
El dictamen pide "introducir una perspectiva de género en la función jurisdiccional y la paridad de género en la estructura judicial" y apuesta por eliminar la inmunidad de los jueces.
Añade que el pluralismo jurídico y cultural en un estado pluricultural "es una legítima estrategia constitucional para garantizar el derecho a la libre determinación de los pueblos indígenas, sin perjuicio de la unidad e integridad del país".
La Comisión de Venecia considera "relevante" que el 9% de los chilenos se asuman indígenas.
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La Comisión Europea para la Democracia por el Derecho, conocida como Comisión de Venecia, se mostró partidaria del establecimiento de un Tribunal Constitucional "separado y especializado, especialmente en las nuevas democracias".
El órgano consultivo del Consejo de Europa en el ámbito constitucional señala que la existencia de una Corte de este tipo "ofrece una mejor protección de los derechos humanos, la separación de poderes y la legalidad constitucional".
La opinión de Estrasburgo no se pronuncia sobre la preferencia de un sistema parlamentario o presidencial, ni aboga por el sistema bicameral. En otras experiencias, "la reforma de la segunda Cámara ha sido más frecuente que su supresión", asegura al tiempo que destaca el papel del Senado en Chile.
La Comisión de Venecia aconseja la adopción de una "nueva y buena Constitución" que se base en un amplio consenso social, un debate amplio que involucre a las fuerzas políticas, ONG, sociedad civil, la academia y los medios de comunicación.
Concluye que, al no haber un texto constitucional definitivo o consolidado, las respuestas a las preguntas del Senado chileno son "abstractas y generales", aunque sigue brindando su experiencia para que la Convención Constituyente pueda finalizar su trabajo.
El proceso constituyente chileno fue impulsado en 2019, con el objetivo de sustituir la actual Constitución, adoptada en 1980 bajo la dictadura de Augusto Pinochet y enmendada en sesenta ocasiones desde 1989.
Chile, al igual que EE.UU., Brasil, México, Corea del Sur, Israel, Perú, Canadá, Costa Rica, Marruecos, Túnez, Argelia, Kazajistán, Kirguistán y Kósovo, es miembro de la Comisión de Venecia, junto a los 46 Estados del Consejo de Europa.