Andrés Fuenzalida y la reconversión del gremio de los Hoteleros:

Andrés Fuenzalida y la reconversión del gremio de los Hoteleros: "Hay residencias sanitarias que todavía no logran firmar el contrato con el Minsal"

Por: Meritxell Freixas | 28.06.2020
Andrés Fuenzalida, presidente de los Hoteleros, conversa con El Desconcierto sobre el proceso de reconversión en residencias sanitarias y las polémicas abiertas en los últimos días sobre los contratos impagos del Minsal.

El Ministerio de Salud quiere ampliar urgentemente 2.ooo camas en los hoteles que funcionan como residencias sanitarias para aislar a las personas contagiadas por el virus. Por ahora, 148 hoteles se han convertido en residencias sanitarias, lo que supone más de 9.500 habitaciones habilitadas. El 57% de ellas están ocupadas. Las residencias sanitarias son hoy una pieza fundamental de la estrategia del gobierno, basada en trazar, aislar y encuarentenar a los casos positivos. Sin embargo, su gestión no ha estado exenta de polémicas en los últimos días: apertura de investigaciones por posibles irregularidades en su contratación, controversias por los contratos y reclamos por atrasos en los pagos del Minsal.

Sobre estos asuntos, el presidente del Hoteleros de Chile, Andrés Fuenzalida, conversa con El Desconcierto:"Hemos recibido contacto de algunos operadores pidiéndonos apoyo para agilizar los pagos", asevera. El empresario, director y propietario de Time Hotel & Apartments, reconoce la labor "titánica" del Minsal en la gestión de la pandemia, pero reclama "un poco más de atención" de parte del "aparataje administrativo y financiero" de la institución. Apunta a atrasos en los pagos, algunas residencias sin contratos y la mayoría ocupadas solo a mitad de su capacidad, mientras se piden nuevas camas.

[caption id="attachment_379998" align="alignnone" width="900"] Foto referencial residencia sanitaria / Agencia Uno[/caption]

¿Cómo ha sido el proceso de reconversión a residencias sanitarias para el gremio?

Ha sido una experiencia rebuena. La industria ha respondido rápidamente a los cinco o seis llamados que como gremio hemos canalizado. He agradecido a todos nuestros socios y actores del sector porque estamos en una situación financieramente compleja y, sin embargo, la industria se ha mostrado solidaria, hospitalaria y preocupada de lo humano. En un primer llamado quisimos juntar 1.800 habitaciones y las juntamos, después 2.000 más y las juntamos, después llegamos a las 12.000. Y ahora hemos hecho un nuevo llamado por 2.000 habitaciones más. También desde el Minsal han sido muy profesionales: han capacitado a la gente de los hoteles, que no está preparada para [trabajar en] estas materias, y se han instalado ahí con un equipo médico para monitorear la evolución de los pacientes y derivar a un hospital si alguien se complica.

¿Han surgido inconvenientes en el camino?

Quizás lo único que podemos decir es que desde la parte de finanzas del Minsal –no de la parte de operaciones– se han demorado mucho en pagar. No sé cuál es el proceso entre que la factura se va a aprobación y se paga, pero se han demorado. Hemos hecho un llamado para que se pongan el día con eso porque los establecimientos que están participando no es que estén bullantes de caja y si se demoran en pagar les perjudica.

¿Cuánta gente estaría afectada por estos atrasos del Minsal?

No tengo un dato preciso para compartir, pero hemos recibido contacto de algunos operadores pidiéndonos apoyo para agilizar los pagos. Aclaro, pero, que no es la mayoría. Hemos trasladado eso a las autoridades y debiera destrabarse. No es que no se les vaya a pagar, pero si se estableció que se va a pagar a 30 días, que eso ocurra.

¿El contrato establece el pago a 30 días?

Sí, las bases del contrato establecen eso. También hay hoteles que están trabajando como residencia sanitaria y todavía no logran firmar el contrato. Al aparataje administrativo y financiero del Minsal hay que ponerle un poco más de atención para que las cosas salgan tan bien como está saliendo en lo operacional.

¿Quién está a cargo de la parte administrativa de las residencias sanitarias?

Hasta el viernes de la semana pasada era la subsecretaría de Redes Asistenciales y ahora se lo entregaron a la subsecretaría de Salud, que está definiendo, según el volumen del contrato, a quién le da el visto bueno.

¿En qué sentido?

Están definiendo una nueva forma de contratar que establecería que para contratos superiores a 50 millones de pesos mensuales debiera pasar a una instancia superior para aprobación [del pago]. Es como un mecanismo de control para perfeccionar el modelo. Esto todavía es una información que está en desarrollo, porque todo se ha ido inventando a medida que se ha necesitado. Nadie estaba preparado para eso. También falta ocupar en un mayor porcentaje los establecimientos que están operativos.

¿De qué montos impagos estamos hablando? Hay información que apunta a cifras superiores a mil millones de pesos de deuda a varios hoteles a cargo del Servicio de Salud Metropolitano Sur.

No le sé decir. No tenemos información sobre eso.

El Minsal dijo a La Tercera que no pagó a dos de los hoteles porque no han acreditado sus niveles de cumplimiento a través de un certificado y que, una vez hecho este trámite, se pagarán los servicios. ¿Consta en el contrato la obligación de acreditar los niveles de cumplimiento?

No tengo antecedentes de eso.

[caption id="attachment_379999" align="alignnone" width="900"] Foto referencial residencia sanitaria / Agencia Uno[/caption]

"Hay que asegurar un porcentaje de la ocupación"

Ha mencionado que las residencias no están ocupándose en su totalidad. ¿Cómo es eso?

Las residencias están definidas por sector geográfico y en función del universo de infectados que hay en ese sector. Ahora se está haciendo un llamado a nuevas residencias sanitarias en algunas comunas donde ya existen. Hay comunas que son vecinas y no están tan lejos del domicilio de las personas afectadas. Hemos propuesto al Minsal que se terminen de llenar los establecimientos ya disponibles, que sean ocupadas en un mayor porcentaje. Si nos mantenemos como ahora, entre el 40 y el 60%, no se alcanzan a cubrir los costos con las tarifas que se convinieron, que tienen un tope de 50.000 pesos por persona, en el mejor de los casos. La mayoría cobran entre 25.000 o 30.000 pesos, con cuatro comidas y eso, al 40% o 50% de ocupación, no da para pagar los costos fijos de calefacción, agua, personal, lavandería, alimentación, etc.

¿A qué porcentaje se consideraría óptimamente ocupado un establecimiento?

En las condiciones actuales, deberían ser sobre el 70 o 75%. En tiempos normales uno alcanza el equilibrio entre el 40% y el 55%, cuando se obtienen entre 80 o 90 mil pesos con un desayuno. Pero ahora estamos hablando de hasta máximo 50.000 con cuatro comidas. Es muy necesario mejorar la ocupación para poder ayudar a estos establecimientos porque si no se llenan, estas operaciones con suerte van a tener un punto de equilibrio a cero y saldrán perdiendo plata. Hay que cuidar eso porque es gente que hace un esfuerzo para entregar ayuda y lo menos que podemos hacer es que lleguen al punto de equilibrio y, ojalá, que ganen plata para salir adelante de la crítica situación en la que se encuentran.

¿Qué tan inferior es el costo por habitación acordado con el Minsal respecto al que se ofrece en tiempos normales al turismo?

Es muy inferior. El Minsal definió la tarifa y estableció que pagaría hasta 50.000 pesos. Y los establecimientos se ofrecieron considerando las condiciones pautadas. Luego el Minsal ha negociado caso a caso. Pero más allá de la tarifa, lo que importa es la cantidad, el volumen de venta que puede tener cada establecimiento.

¿Qué explicación les ha entregado el Minsal para pedir más habitaciones aunque los establecimientos disponibles no estén llenos?

No la sé, pero debe tener que ver con proyecciones de más contagiados y quieren tener los establecimientos predefinidos. Podemos tener a las personas listas y capacitadas para abrir, pero sin tener los hoteles abiertos si no existe una necesidad porque esto provoca un daño mayor.

¿En cada pieza hay una persona o se pueden compartir?

Hay casos en que se comparte la pieza, por ejemplo, entre un matrimonio o una familia. Ocurre en menos casos.

¿La reconversión a residencia sanitaria ha ayudado a paliar la situación que atravesaron los hoteleros tras el estallido social?

Entre octubre y diciembre, las ventas cayeron en un 30%. Teníamos la OCDE y la APEC que se cancelaron y no se repusieron. El verano fue muy lento y hubo menos movimiento. Recién en marzo, cuando empezábamos a tener mejor comportamiento, llega el coronavirus. Cuando el gobierno decreta el estado de catástrofe, los hoteleros pierden todas las reservas que tenían y a principios de abril un 98% estaba cerrado sin orden de la autoridad. La hemos tenido muy difícil en lo práctico, en lo operacional y en lo financiero. Esta reconversión podría ser una ayuda si se conjugan algunos factores. Muy pocos hoteleros han pactado 50.000 pesos de tarifa por persona (o por habitación, en algún caso), la mayoría acordó 35.000 o 40.000 pesos. Si uno cuenta con esa cifra al 40% o al 60%, no se llega. Hay que pagar la mejor tarifa que se pueda, pagar oportunamente y asegurar un porcentaje de la ocupación, porque si no se le traspasa el riesgo al particular y se lo puede terminar dañando. Le pediría al sector público que la ayuda, efectivamente, sea. El Estado tiene que dar ejemplo porque ha promulgado una ley de pago de factura a 30 días para el sector privado y el ejemplo para eso tiene que proceder del sector público. Sabemos que no hay mala voluntad y que hay trabas burocráticas, pero provocan daños importantes.