Premio Nobel de Economía y docena de reconocidos colegas proponen impuesto mínimo de 25% a transnacionales para solventar la crisis 

Premio Nobel de Economía y docena de reconocidos colegas proponen impuesto mínimo de 25% a transnacionales para solventar la crisis 

Por: El Desconcierto | 15.06.2020
El autor de “El capital en el Siglo XXI”, Thomas Piketty, y el premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, son quienes lideran la propuesta, que supone aumentar a 25% los impuestos a las grandes corporaciones, en beneficio de los Estados donde estas operen. Entre otras medidas, los economistas proponen también la introducción de impuestos a los grandes de los medios digitales, como Amazon, Google o Facebook, que "son los que más se han beneficiado en este tiempo" y "no están pagando lo justo", aseguran.

Una propuesta para ayudar a crear solidez fiscal en medio de la pandemia -y así poder aumentar el gasto público- es la que este lunes publicaron catorce economistas de renombre mundial, liderados por el francés Thomas Piketty, y el estadounidense Joseph Stiglitz (Premio Nobel de Economía 2001).

En su texto los expertos sostuvieron que “ante la necesidad urgente de recursos públicos, mantener las estructuras tributarias actuales no será una vía de salida suficiente”, proponiendo ante ello una serie de medidas impositivas.

El grupo compuesto también por José Antonio Ocampo y Jayati Ghosh, reúne a miembros de la Comisión Independiente para la Reforma de la Fiscalidad Internacional sobre las Empresas (ICRICT por sus siglas en inglés), y propone específicamente cinco puntos principales: la aplicación de un tipo impositivo más alto a las grandes corporaciones que operan en sectores oligopolizados con tasas de rendimientos excesivas; el establecimiento de una tasa impositiva corporativa mínima efectiva del 25% en todo el mundo para detener de la erosión de las bases fiscales; la introducción de impuestos progresivos a los servicios digitales sobre las rentas capturadas por las compañías multinacionales; la publicación de informes país por país de todas las compañías que se benefician del apoyo estatal; y la publicación de datos sobre riqueza para permitir que todos los países puedan establecer impuestos progresivos sobre el patrimonio de sus residentes y para poder analizar las tasas efectivas de los impuestos sobre la renta de los contribuyentes con mayores ingresos.

A este respecto, Stiglitz indicó que “un tipo mínimo en el impuesto de sociedades basado en el lugar donde se generan los ingresos es más urgente e indispensable que nunca”, mientras que Piketty señaló que “es importante entender que los impuestos de Sociedades no son suficientes y deben ser parte de un sistema integral de tributación progresivo, que contemple la renta y el patrimonio”.

Asimismo, respecto del impuesto a los servicios digitales, Stiglitz argumentó que las grandes empresas de internet, como Amazon, Google o Facebook, “son las que más se han beneficiado en este tiempo, porque su consumo no requiere del cara a cara”, y que "desde antes de la crisis no están pagando lo justo en impuestos y eso distorsiona la economía, dañando la creación de trabajos y retrasando la recuperación”.

En tanto, en lo relativo a la publicación de informes sobre la riqueza, el documento sostiene que “el uso de estructuras offshore permite no sólo que la propiedad real de esta riqueza permanezca oculta, sino también su ubicación y tal vez su misma existencia. Esta misma opacidad también crea un terreno fértil para el fraude fiscal y para los delitos financieros”.

Según lo aclara el mismo documento, los planteamientos son contrarios a la reducción de impuestos corporativos que están implementando países como Estados Unidos y Francia, lo que para los economistas “no es económicamente eficiente, ni socialmente deseable”.

"Si los gobiernos quieren que la recuperación dure diez años, pongan medidas de austeridad”, sostuvo Stigliz al respecto, mientras que José Antonio Ocampo, presidente del Comité de Políticas de Desarrollo del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) y parte de los autores de la propuesta, agregó que se requiere “más gasto para pobres y vulnerables. No es el momento para la austeridad, es el momento para gastar más, sobre todo en salud”.