Científicos del MIT y Harvard desarrollan máscara con luz especial para detectar el COVID-19
Científicos del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y de la Universidad de Harvard se encuentran trabajando en la elaboración de una máscara facial con sensores que detecte el coronavirus y emita una señal fluorescente ante su presencia, apelando a una tecnología que ya existe y fue previamente testeada con otros virus, como es el caso ébola y que ahora se adapta al COVID-19.
El proyecto está encabezado por el profesor de Ingeniería Médica y Ciencia y de Ingeniería Biológica en el MIT y el miembro de la Facultad de Ciencias y Tecnología de la Salud Harvard-MIT, el bioingeniero James Collins y el objetivo es que la máscara genere una señal cuando la persona afectada por el coronavirus respire, tosa o estornude y la saliva haga contacto con los sensores, para lo cual se requiere detectar la secuencia genética del virus.
“Los sensores consisten en material genético, ADN y ARN, que se une a un virus. Ese material se liofiliza sobre la tela utilizando una máquina llamada liofilizador, que absorbe la humedad del material genético sin matarlo”, ilustró Collins a Business Insider.
En su opinión, este equipo será útil para un diagnóstico temprano del COVID-19. “A medida que abrimos nuestro sistema de tránsito, podría imaginarme que se utilizará en los aeropuertos conforme vamos avanzamos en la seguridad, mientras esperamos subir a un avión”, sostiene el científico.
Respecto de su uso, la máscara también podría ser empleada en el trabajo o “los hospitales podrían usarlo para los pacientes cuando entran o esperan en la sala como una prueba previa de quién está infectado”.
En relación al diseño, actualmente se discute la implementación de los sensores al interior de la máscara, aunque otra alternativa es generar crear un dispositivo que se conecte a cualquier mascarilla de venta libre.
Collins, por su parte, espera que en las próximas semanas esté listo el modelo para testearlo en pacientes con coronavirus.
Adicionalmente, el investigador del MIT explica que la señal fluorescente no es perceptible a simple vista, pero que los usuarios podrían usar harina para escanear las máscaras, aunque también se evalúa utilizar sensores que cambian de color amarillo a púrpura cuando se detecte la presencia del virus.