Desde el pasado octubre, cuando Sebastián Piñera decretó Estado de Emergencia junto al toque de queda tras el estallido social, la salida de militares a la calle ha sido cuestionada. Hoy, en medio de la pandemia por el COVID-19 y con los militares nuevamente desplegados en las calles haciendo cumplir las distintas disposiciones sanitarias entabladas por el gobierno, muchos han puesto en debate el uso de las armas de guerra que usan los efectivos como parte de su uniforme.