Joaquín Sabina se recupera en la UCI tras caer en pleno concierto y ser operado por un derrame cerebral
Ayer cumplía 71 años y los celebraba en grande haciendo lo que mejor sabe, cantar. Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat llenaron el WiZink Center de Madrid con 12.000 personas y todo avanzaba normal, hasta que Sabina empezó a presentar Mediterráneo. En ese momento, no se dio cuenta que estaba acercándose al límite del escenario y cayó más de dos metros al foso de seguridad.
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Después apareció en silla de ruedas para explicar al público que no podría seguir cantando. "Estas cosas solo me pasan en Madrid, bromeó haciendo alusión a otros dos percances que tuvo en ese mismo escenario (2014 y 2018). Y siguió, para tranquilizar al público: "Me he dado un golpe muy fuerte que duele mucho. Con todo el dolor de mi corazón nos vamos al hospital, porque el hombro este lo tengo muy, muy, muy, muy dolorido". El público, que lo había esperado unos veinte minutos, le respondió con un "¡Te queremos!".
Una vez en el hospital y luego de varias informaciones confusas, el músico fue operado con éxito por un coágulo intracraneal. "La operación ha terminado y ha sido satisfactoria", aseguró José Navarro, Berry, representante del cantante, que ha querido "tranquilizar a todo el mundo porque está bien". Sabina tendrá que pasar 48 horas en observación, según han confirmado fuentes médicas. Y a través de su propia cuenta del pajarito azul, que dieron la información correcta.
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El de anoche es el tercer percance de consideración que sufre Sabina en Madrid en los últimos cinco años, siempre sobre el escenario del WiZink. El 13 de diciembre de 2014 acortó el concierto después de sentirse "indispuesto" y ser afectado por pánico escénico. Con posterioridad explicó que ya había sufrido "un vahído" antes de comenzar el recital.
En febrero de 2018, el músico suspendió dos conciertos en México: tras un mareo debido a molestias en un oído, sufrió una pérdida de equilibrio y un golpe en un ojo que le produjo un fuerte hematoma. En abril del mismo año, Sabina fue hospitalizado por una "trombosis venosa aguda" en una pierna, y por ello suspendió una actuación en la Coruña. Y dos meses después, en junio, el artista abandonó un concierto en el mismo WiZink Center de Madrid tras quedarse "totalmente mudo", como contó entonces desde el escenario Pancho Varona. Sabina terminó cancelando las últimas cuatro fechas que quedaban de su gira Lo Niego Todo, en la que había ofrecido casi 80 actuaciones entre España y América Latina. "Ha sido sometido a una revisión médica y diagnosticado con una disfonía aguda consecuencia de un proceso vírico. Le han prescrito un reposo de 30 días", informó entonces la organización.