Gobierno autoproclamado en Bolivia crea aparato para perseguir afiliados del MAS

Gobierno autoproclamado en Bolivia crea aparato para perseguir afiliados del MAS

Por: Victor Farinelli | 19.11.2019
El ministro de gobierno, Arturo Murilo, dijo que impulsará una misión para encarcelar a figuras del partido de Evo Morales que no reconozcan la autoridad de la autoproclamada presidenta Jeanine Áñez. También habrá censura a periodista que no consideren su proclamación, que no contó con el quórum mínimo.

El senador boliviano Arturo Murillo, recientemente nombrado ministro de Gobierno en su país –responde a la autoproclamada presidenta Jeanine Áñez–,anunció el lunes que la fiscalía pasara a contar con un “aparato especial contra personas que comentan actos de subversión y sedición”.

En su declaración, Murillo no tuvo el cuidado de disfrazar que esa medida apunta a perseguir figuras vinculadas al Movimiento Al Socialismo (MAS), partido de Evo Morales. Según él, “hay senadores y senadoras, diputados y diputadas, no todos, unos cuantos, que voy a empezar a publicar sus nombres, que están haciendo subversión. A partir de lunes voy a ordenar, ya tengo listas que los mismos dirigentes de varias zonas me están pasando, los van a empezar a detener con órdenes fiscales”.

El senador habló de censura a los periodistas bolivianos y extranjeros que sean considerados colaboradores de esas figuras del MAS señaladas en las investigaciones, y que el nuevo gobierno considere que “provocan desordenes”.

Les pedimos que informen, no que desinformen. Los ministros, la Policía y las Fuerzas Armadas (FFAA) no necesitamos que nos hagan propaganda. Una vez más les pedimos a estos periodistas, sobre todo de medios radiales, que hagan su trabajo y no cometan sedición”, declaró el senador-ministro.

Cabe señalar que el gobierno de Jeanine Áñez empezó hace una semana, cuando la entonces senadora se autoproclamó presidenta del país en una sesión que no contó con el quórum mínimo necesario para legitimar su asunción –se hizo viral la foto de la ceremonia con la sala del Senado vacía.

Desde entonces, se desató en el país una fuerte protesta social exigiendo su renuncia, y una represión más fuerte aún por parte de las Fuerzas Armadas y de la policía, que ya ha dejado 23 fallecidos y centenares de heridos y detenidos.