Desde 2004 las personas mayores organizadas han hecho gestiones para extender la rebaja en sus pasajes del Metro a todo el transporte público del país. Las formas han sido diversas: han solicitado reuniones con las autoridades pertinentes, han visibilizado su causa a través de los medios de comunicación, y se han manifestado de forma pacífica, sin obtener una respuesta oportuna a sus demandas.

Desde el Congreso, durante los últimos 5 años se han levantado 10 Proyectos de Resolución solicitando al Presidente de la República la rebaja del pasaje, pero éstos tampoco fueron tomados en cuenta.

Este año y el pasado estuvimos junto a la Federación de Adultos Mayores marchando en sus manifestaciones, donde el acceso al transporte fue una de las principales peticiones de quienes asistieron.

Junto a la recién mencionada Federación, nos reunimos el lunes previo al estallido social que ha remecido nuestro país, con José Luis Domínguez, subsecretario de Transporte, por el mismo motivo, pero “se le tiró la pelota” al Ministerio de Desarrollo Social, desde donde se respondió que no hay recursos disponibles para que adultos mayores puedan movilizarse con una tarifa rebajada.

Desde hace al menos 3 años, cuando se discute el presupuesto de la nación, el Ministerio de Transportes responde que se estudiará la extensión en el subsidio a los adultos mayores y, sin embargo, nunca se concretó nada.

Pese a las evasivas desde las carteras de Transporte y Desarrollo Social, financiar la rebaja del transporte, por ejemplo, a las personas con Pensión Básica Solidaria, correspondería a menos del 0,52 % del presupuesto nacional: el trillado argumento de la falta de recursos simplemente no es real.

Entonces, no nos vengan a decir que las personas no han expresado respetuosamente sus demandas, con paciencia y confianza en sus representantes. El problema es que nada ha cambiado, el tiempo se acabó y la rabia explotó. Hoy el pueblo de Chile se ha pronunciado vehementemente, dándole una nueva oportunidad al Gobierno de escuchar y responder a sus demandas, esperamos que el Ejecutivo esté a la altura de lo que se lleva años pidiendo, y cumpla otorgándole a las personas mayores su derecho a la movilización.