Una publicación realizada por el entonces concejal de Río de Janeiro, Carlos Bolsonaro, la noche de este lunes, dejó preocupado a todo Brasil.

El segundo más grande de los hijos del presidente Jair Bolsonaro –considerado su principal asesor comunicacional y el que maneja las redes sociales del Palacio del Planalto– afirmó en su cuenta de Twitter que “el gobierno viene deshaciendo absurdos que nos llevaran al limbo y trata de arreglarnos el eje. El relato de ciertos grupos y sus razones cada vez más clara$ lamentablemente son rápidamente absorbidos por inocentes. Los avances ignorados y los malhechores olvidados”.

En seguida, la declaración más polémica: “Por las vías democráticas la transformación que Brasil quiere no sucederá en la velocidad que deseamos... si es que viene a suceder. Solo veo todos los días la rueda girando alrededor de su propio eje y los que siempre nos dominaron ¡siguen dominándonos de formas diferentes!”.

Por vias democráticas a transformação que o Brasil quer não acontecerá na velocidade que almejamos... e se isso acontecer. Só vejo todo dia a roda girando em torno do próprio eixo e os que sempre nos dominaram continuam nos dominando de jeitos diferentes!

— Carlos Bolsonaro (@CarlosBolsonaro) September 9, 2019

La publicación tuvo rápida repercusión en el país, con muchas instituciones y organizaciones tratándola como una amenaza abierta a la democracia. La Orden de los Abogados de Brasil (similar al Colegio de Abogados en Chile), reaccionó a través de una entrevista de su presidente, Felipe Santa Cruz, quien dijo que “no se puede aceptar una familia de dictadores (…) es la hora que los demócratas de Brasil se levanten para dar un basta”.

Cabe recordar que Santa Cruz fue blanco de burlas por parte de Jair Bolsonaro, en julio de este año, cuando aseguró saber la verdad sobre su padre, el líder estudiantil Fernando Santa Cruz, desaparecido en el año 1974, durante la dictadura brasileña (1964-1985): “él no va a querer saber la verdad”, dijo el mandatario.

Otro que reaccionó a la declaración de Bolsonaro fue el filósofo y profesor de la Universidad de São Paulo (USP), Paulo Arantes: “puede ser que llegue un momento, dentro de tres años más, en que Bolsonaro no acepte entregar el poder, y nos diga que no admite ninguna alternativa que no sea su reelección. De hecho, durante la campaña del año pasado, él dijo que no aceptaría `ningún resultado que no sea mi victoria´”.

Dijimos en el primer párrafo “el entonces concejal”, porque Carlos Bolsonaro anunció este martes por la mañana que pidió su alejamiento sin remuneración de sus funciones como edil de Río de Janeiro. No especificó si esa decisión tiene que ver con la polémica desatada por la publicación de ayer en Twitter, pero dijo, horas después, en esa misma plataforma, que “como mi padre, también estoy muy tranquilo y el poder jamás me sedujo. ¡Buena suerte siempre a todos nosotros!”.

Sobre la seducción del poder, cabe recordar que casi toda la familia Bolsonaro ocupa cargos políticos hace mucho tiempo: Eduardo Bolsonaro es diputado desde 2015 (y ahora está indicado por su padre para ser embajador en los Estados Unidos, esperando aprobación del Senado); Flávio Bolsonaro es senador y ha pasado por cargos públicos diversos desde 2003; Jair Bolsonaro es presidente y está en la política desde 1989; y el propio Carlos Bolsonaro es concejal desde el año 2001.