Carlos Bolsonaro es conocido en la familia como "02" (su padre, el presidente brasileño Jair Bolsonaro, suele llamar a sus hijos por números) y destacado por su constante actuación en las redes sociales. De hecho, muchas veces el mandatario ha reconocido que él escribe algunos de los mensajes de su cuenta personal.

Sin embargo, esa relación de confianza se vio complicada esta semana, luego de una discusión durante el domingo de Pascua, en la que Jair Bolsonaro le reprochó justamente por haber publicado un video en su cuenta personal de Twitter en el que aparece el youtuber Olavo de Carvalho (especie de guía intelectual de la familia Bolsonaro hace muchos años) atacando al vicepresidente Hamilton Mourão, asegurando que él estaría conspirando para derrocar al mandatario.

Ante la posible crisis interna, Bolsonaro padre ordenó a su hijo que "apagara" Twitter, lo que fue obedecido. Tras hacerlo, Carlos Bolsonaro también publicó un saludo presidencial por la Pascua, y luego no se vio más mensajes nuevos en esa cuenta durante todo lunes y martes. Según el periodista Guilherme Amado, de Revista Época (perteneciente al grupo O Globo), los días de abstinencia se debieron a un castigo de Carlos Bolsonaro, quien habría bloqueado la contraseña de la cuenta, impidiendo su acceso por parte del presidente.

Aunque Jair Bolsonaro publicó un mensaje también por Twitter diciendo que eso se trata de una fake news, lo concreto es que su cuenta quedó en silencio durante todo lunes y martes, algo raro considerando que es la red social en la que más escribe.

Además, el hecho más raro de ese periodo de abstinencia tuitera, fue que el perfil de Bolsonaro quedó sin celebrar la primera gran victoria legislativa de su gobierno, tras la aprobación del texto de la reforma previsional este martes en la Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados.

Peleas entre el hijo y el vice

Esta no es la primera vez que Carlos Bolsonaro (quien es concejal en la ciudad de Río de Janeiro) y el vicepresidente Hamilton Mourão se enfrentan.

La relación empezó a tener problemas luego de la primera baja del gabinete de Bolsonaro. En febrero pasado, el presidente pidió la renuncia del secretario general de la presidencia, Gustavo Bebianno, situación que generó una guerra de declaraciones entre el ex-funcionario y los hijos del mandatario, especialmente Carlos. En ese entonces, el vicepresidente expresó que “es necesario que los hijos se alejen de los temas del gobierno y entiendan la dimensión del sillón (en referencia al que ocupa el padre)”.

La frase fue tomada como un ataque por los tres hijos que actúan en la política: además de Carlos (02), el senador Flávio Bolsonaro (01) y el diputado Eduardo Bolsonaro (03) – los números son los nombres por los que su padre lo llama, y corresponde al orden en que nacieron.

Pero fue solamente en abril cuando Carlos Bolsonaro pasó a referirse más abiertamente a un supuesto comportamiento conspiratorio del vicepresidente, incluso cuestionando lo que llama de “acercamiento político con los que odian al presidente”, como el exdiputado socialista Jean Wyllys.